El nuevo mapa de titulaciones de las universidades públicas valencianas pasará de 407 titulaciones a 188 grados a partir del curso 2015/2016 y reducirá los másteres de 345 a 282. Para ello, en el curso 2013/2014 desaparecen de la oferta universitaria 89 titulaciones por la consolidación del Espacio Europeo de Educación Superior y, al siguiente, se quitarán otras 130 hasta obtener las 188 finales.
El documento ha sido rubricado este miércoles en el Palau de la Generalitat Valenciana en un acto presidido por el jefe del Consell, Alberto Fabra, con presencia de los rectores de las universidades, los presidentes de los consejos sociales de estas instituciones y la consellera de Educación, María José Català.
Fabra ha destacado el consenso entre administración y universidades para acordar este mapa de titulaciones con el que, según ha dicho, se ha dado «un paso más en este camino para ser eficientes». Además, permitirá «vincular» la generación de conocimiento de las universidades con el tejido productivo y económico de la Comunitat.
Entre los aspectos destacados de este acuerdo, para la implantación de grados, deberán contar con un mínimo de 50 alumnos; no podrán tener duplicidad en la misma provincia salvo que esté justificado por la solicitud de alumnos y se elaborará una relación de grados que favorezca la demanda de tejido productivo y la empleabilidad de los alumnos.
Asimismo, el mapa de titulaciones contempla dos tipos de máster, el de orientación profesional, habilitantes para ejercer una profesión; y el de orientación investigadora, para la especialización o investigación.
Por lo que se refiere a los postgrados, el acuerdo alcanzado entre Generalitat y universidades modifica la proporción de los mismo de 1,8 a 1,5 por cada grado. En este sentido, se pretende alcanzar el 12 por ciento de alumnos frente al ocho por ciento actual (11.618 alumnos) y los másteres que se habilitan para el ejercicio de profesiones reguladas por ley serán considerados como títulos de grado, a efectos de ordenar su oferta, presencia territorial y cálculo de ratio.
En el mapa de titulaciones, aquellos másteres que sean financiados en más de un 50 por ciento por empresas e instituciones privadas, no computarán en el ratio y tampoco los que resulten de convenios con universidades extranjeras. Por tanto, no habrá límite de cantidad. En los másteres interuniversitarios se reparte el cómputo por el número de universidades públicas valencianas que participan.
Durante su intervención, el presidente de la Generalitat ha afirmado que este mapa «lo requiere el momento» porque hay que ser «eficientes» con los recursos públicos y «no caben las duplicidades» en las titulaciones.
«TASA DE DESEMPLEO»
Fabra también ha afirmado que una sociedad con estudios presenta una menor tasa de paro y ha destacado que aquellas personas que tienen máster o estudio de postgrado tienen una tasa de desempleo del 8,8 por ciento, y los licenciados, del 13,5 por ciento, frente a la tasa general del 26 por ciento.
Por tanto, ha agregado, «hay que intentar que las personas que adquieran conocimientos en las universidades «accedan al mercado laboral» y «sean útiles» a la sociedad. Fabra también ha apostado por incrementar el número de personas que realicen un máster.
Para Fabra, este documento «dice que queremos estar preparados para el futuro» y que somos capaces de «reflexionar, de modificar y de hacer aquello que sea necesario para tener las mejores universidades». Con el mapa, ha asegurado, se consigue un futuro «más esperanzador» y «vinculado al tejido productivo».
«EQUILIBRIO» Y FINANCIACIÓN
El presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas Valencianas, Manuel Palomar, ha defendido la universidad como el «proyecto social más importante» y espera que con este mapa de titulaciones se alcance un «equilibrio entre oferta y demanda» en los grados y másteres.
Fabra espera que este acuerdo «suponga un ‘status quo’ para respetar las nuevas autorizaciones de grados y másteres» en la universidad pública y privada; así como que permita «avanzar en la senda del entendimiento de las universidades»; y «debería suponer la puesta en marcha del plan plurianual de financiación» de las universidades, ha agregado.
MOVILIDAD
En nombre de los presidentes de los consejos sociales universitarios, Carlos Pascual, ha valorado el mapa de titulaciones porque estas instituciones académicas «han competido entre ellas muchas veces, casi encarnizadamente, por las titulaciones», quizá, ha apuntado, por el modelo de financiación.
Asimismo, ha defendido que las universidades «deben ser centros de excelencia» y generar una «acción social» como es la «movilidad» de los alumnos. En este sentido, considera que «no es un tema grave» que los alumnos «deban trasladarse 100 ó 150 kilómetros de su casa» para recibir la educación universitaria.
Pascual ha recordado que este año cuatro de los cinco presidentes de los consejos sociales de las universidades públicas deberán dejar el cargo –los de la Universitat de València, la Universitat Politècnica de València la Universidad de Alicante, y la Universitat Jaume I de Castellón .
Así, ha aprovechado para despedirse y reclamar al presidente Fabra que, dados los escasos recursos públicos, no permita «intereses locales». Pascual también ha reclamado «más medios» para los consejos sociales porque tienen «muchas competencias y para eso «no hace falta esperar a una reforma legislativa sobre la Gobernanza de las Universidades».
Finalmente, ha afirmado que «jamás» han recibido en el desempeño de sus cargos «una sola presión o injerencia» o una «pretensión indebida» y se han sentido con la «confianza de la administración», ha apostillado.
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