Inma Sequí que concurrió a las pasadas elecciones del 24 de mayo siendo la candidata más joven ha hablado para el diario La Gaceta sobre su agresión en una breve entrevista que ha ofrecido ha dicho medio de comunicación.
La presidenta de VOX en Cuenca vivió en sus propias carnes la violencia política y el totalitarismo de la izquierda más radical. Tres individuos le propinaron una paliza al grito de ‘fascista de los cojones’. A pesar de lo sucedido, Sequí no conoce el significado de la palabra miedo y espera que la ciudadanía haga lo mismo.
-¿Dónde comenzó la andadura política de Inma Sequí?
Tenía doce años y me metí en un club juvenil dentro de Nuevas Generaciones del PP.
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-¿Qué ideas le llevaron a introducirse en NNGG?
Tenía un concepto de patriotismo muy asimilado, me lo habían explicado en casa. Siempre me he interesado por los atentados de ETA, por la historia de nuestro país… Quizá el 11M fuese el detonante para que yo decidiese que esto no podía seguir ocurriendo en mi país.
-A parte de las ideas, habrá algún referente político….
Es Margaret Tatcher. Fue una primer ministro con valentía, un detonante contra el comunismo. Me impactó y me impresionó. Creo que fue un ejemplo para mí su política liberal, su concepto de sociedad, de familia, de libertad… Siempre procuro parafrasearla y tener muy presente su figura.
-Empezaste en el PP pero ahora estás en VOX
Cuando comenzaron las excarcelaciones tras la anulación de la doctrina Parot, cuando vi a Bolinaga en la calle. Esa imagen me produce un sentimiento entre tristeza, rabia e impotencia, es algo que no puedo evitar. Ese PP que permitió eso ya no era el partido de María San Gil, de Mayor Oreja, ni de Santiago Abascal. Ya no era el Partido Popular de esas personas, de esos héroes que yo tenía como referentes.
-Su familia, sus amigos, ¿cómo ven que se dedique a la política?
Mi familia ya empieza a comprenderlo. Lógicamente les costó en un principio, les extrañaba que no me preocupara por lo mismo que el resto de jóvenes, que me preocupara por mí el futuro de las nuevas generaciones. Les impactó en ese momento, me lo comentaron. Sin embargo en el fono sé que me lo agradecieron, porque he podido evitar tener otro tipo de actitudes que no sean tan, desde mi punto de vista, dignas.
-¿Qué relación tiene con Podemos en Cuenca?
No tengo ninguna relación. Yo recibí una llamada de un miembro de Podemos cuando se organizó el revuelo por las amenazas que recibí para no acudir a un debate sobre la Ley de Educación. Me llamó cuando tres grupos radicales nos amenazaron, al grito de fuera fascistas de la Universidad, con emplear la violencia. El miembro de Podemos me dijo: ‘’no vayas por favor, hazlo por ti, yo sé de tu orgullo y sé que te vas a arriesgar’’. Esa llamada es la única relación que he tenido con ellos.
-¿Por qué decidieron finalmente no acudir a la cita?
Se decidió no acudir, más que por la integridad de la gente de VOX Cuenca, por la de los estudiantes, al poder convertirse aquello en una sangría. Eso fue lo que me dijo el miembro de Podemos y es la conclusión que sacamos tras las amenazas.
-¿Una sangría?
Una sangría fueron las palabras textuales. De esos tres grupos radicales no conocía. Jamás he tenido relación con radicalismo, de ningún extremo, porque creo que chocan. Desconocía de su existencia hasta que me vi amenazada por ellos, hasta que ese miembro de Podemos confesó que tenía relación con los mismos y me pidió que no acudiese, que era peligroso para mí.
-¿Tuvo miedo y por eso decidió no acudir?
Lo consulté con mis compañeros y decidimos seguir adelante. N o íbamos a hacer un mitin político, íbamos a ver que opinaban los estudiantes sobre la Ley Wert. Que apareciese mi nombre junto al de José García Molina, líder podemita en la región, fue el detonante. La organización decidió que no acudieran políticos al acto, sin embargo, Podemos decidió ir y no pasó absolutamente nada. el hombre ni denuncio las amenazas ni nada
-¿Era usted la única amenazada?
Sí. A pesar de que la asamblea de estudiantes decidiese que no acudiera ningún político para que no hubiera altercados, este señor acudió y fue escuchado y respetado.
-¿Tiene alguna otra dedicación además de la política?
Mi objetivo ahora es trasladarme a Madrid y sacar mi carrera de Derecho y Criminología. El objeto es formarme poder formar parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Creo que es otra forma de ayudar al ciudadano. De la política no quiero vivir.
-¿Hay alguna novedad sobre los autores de su agresión?
No. Hace unos días un policía se acercó a mí y me enseñó una foto de una mujer rubia, el único adjetivo que pude dar de los agresores, junto a su novio. Por lo visto eran de un grupo antitaurino. En ese momento dije que no podía acusar a nadie, no les vi bien la cara. La tarea es difícil.
-¿Cómo recibe la oferta del Gobierno de asignarle protección?
El ministro de Interior calificó la agresión de atentado político, después de hacerlo Santiago Abascal, y coincido plenamente. Pero yo lo que no quiero es que se use mi caso para difundir miedo a la sociedad, o que se emplee como arma electoral desde el propio sistema. Cuando hablo de me refiero al partido popular. Voy a condenar cualquier agresión sin tener en cuenta la ideología o partido, pero me da la sensación que se va a usar como arma contra el propio partido político VOX, como arma para infundir miedo con el ‘’que viene Podemos’’. Los ciudadanos no merecen ese discurso del caos. No podemos dejarnos llevar por ese miedo, es lo único que teme.
Inma Sequí estará este miércoles en el Gato Al Agua, la tertulia política de Intereconomía TV que dirige y presenta Javier Algarra.
