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“Podemos es una estafa”

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Enric Martínez-Herrera es profesor acreditado de Ciencias Políticas y Sociología, afiliado a la Universidad de Cambridge, y uno de los que no tragaron con que Podem-ICV formase lista con soberanistas e independentistas. Se levantó en UNIDOS SI, integrada por personas próximas a Podemos y a la izquierda de Ciutadans, con la que ahora pretende concurrir a las generales y anda recogiendo avales. “La única izquierda sensata que hay en este momento somos nosotros”, ha comentado para el diario La Gaceta.


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La Gaceta / Al partido de Pablo Iglesias lo tacha de “piramidal, ultra-jerárquico, con purgas a sectores críticos, y de modelo estalinista”. Dice que la gente que vota a Podemos “por desesperación y por desinformación, por desgracia, porque si estuvieran mejor informados ya no apoyarían a este engaño”, del que ahora los podemitas quieren lavar la cara de cara a las Generales para intentar sacar muchos diputados. “En ‘Catalunya sí que es Pot’ la orden es que ahora no toca ser nacionalista y hasta el 20 de diciembre “mano de hierro”. El ‘Coscu’, como llama todo el mundo en Cataluña a Coscubiela, te “casca” gobernando el grupo parlamentario”, relata.


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Asimismo, destaca que crear un partido es muy difícil y que si hacen este esfuerzo es porque saben que “es necesario porque no hay nada aceptable, ni siquiera el PSOE, el clavo ardiendo al que se agarra la gente para no votar cosas peores, aunque éste está en manos del PSC”.

A los que en sus discursos deslizan el concepto de desobediencia civil cada dos por tres, como Junts pel Sí y la CUP, los tacha de “tramposos y tahúres del Mississippi”. “Lo que hacen es sedición. Lo suyo es un golpe de Estado civil, al estilo de la República Francesa. La desobediencia civil la puso de moda Gandhi, con el que les gusta compararse, pero no tienen nada que ver con él, sino más bien con Tejero, Mussolini, Primo de Rivera padre, y con lo que hizo Companys en el 34”, sentencia.


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-¿Por qué dio el portazo en Podemos?

Hace un año nos dimos cuenta de que en Podemos Cataluña habían metido a muchísimos nacionalistas en las estructuras del partido, que venían de Revuelta Global, una organización trotskista, pero sobre todo de ‘Procés Constituent’, el partido de la monja Teresa Forcades. Comprendimos que estaban dentro por un pacto. En diciembre de 2013 Pablo Iglesias se reunió con David Fernández, de la CUP, para intentar montar el partido en Cataluña, pero Fernández le dijo que no podía ser que estuvieran en Podemos. A principios de 2014 Iglesias se encontró con Teresa Forcades y acordaron que ‘Procés Constituent’ sería la columna vertebral de Podemos en Cataluña. Fue una decepción cuando lo descubrimos.

-¿Y a estas alturas, tras los pactos con Bildu o el haber encumbrado a la radical Forcadell en la Cámara, qué siente?


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-Que es una estafa al electorado, un fraude, un engaño en toda regla. Un engaño a gente que cree que está votando a un partido de izquierdas en toda España y en realidad en sitios como Cataluña está apoyando a personas nacionalistas e incluso independentistas, como Lluís Rabell o Joan Giner. Prácticamente todos los diputados de Podemos son nacionalistas. El electorado ha votado a un partido español, que muchas veces incluso se arroga el ser patriótico. Encumbran a nacionalistas como Forcadell como presidenta del Parlament; han pactado con EH Bildu en Navarra, con Compromís en Valencia, que incluye nacionalistas radicales; en Badalona han hecho alcaldesa a una señora de la CUP, que jamás había obtenido un concejal. Es culpa de Podemos que haya alcaldes de ERC en Sabadell y en Tarrasa. Y para más inri, los concejales de Podemos de muchas localidades de Cataluña apoyan a la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI). Han votado a favor de que sus ayuntamientos integren y financien esa asociación.

-¿Cree que Mas contará en la segunda vuelta con el apoyo los podemitas independentistas?

En esa sopa de letras de ‘Catalunya sí que es Pot’, que engloba a Podem, ICV y EUiA, está como jefe de filas Coscubiela, que es un hombre de la casta de CC OO, habituado al mando, y está poniendo orden dentro del grupo parlamentario. Las instrucciones son muy claras: hasta el 20 de diciembre, “mano de hierro”. El ‘Coscu’, como le llama todo el mundo en Cataluña, te “casca” con mano de hierro gobernando el grupo parlamentario. Ahora no toca ser nacionalista porque si no nos vamos a cargar el invento de que Podemos saque muchos diputados en las Generales. Pretenden ocultarlo, que no se note y correr un tupido (o “estúpido”) velo hasta entonces.

-De ahí que Joan Giner no pudo hacer lo que le pedía el cuerpo el pasado lunes en el Parlament…

-Sí. Joan Giner representa en el Parlament a la ciudad dormitorio de Cornellá, y el Bajo Llobregat, la comarca más industrial de Cataluña a día de hoy, el clásico bastión de la izquierda industrial. Lo que ha hecho Giner es una estafa porque ha vendido a sus votantes que es el representante de un proyecto de reforma de justicia social para toda España, cuando es nacionalista perdido. El día de la apertura de la legislatura es de los que cantaron el himno xenófobo catalán ‘El Segadors’ con un enorme entusiasmo y con el puño en alto, como si fuera una reivindicación revolucionaria. Ahora está vendiendo su conciencia. Este lunes tuvo que votar que no a la resolución porque si no Coscubiela le “cascaba” y ahora está pagando su precio a Satanás. Tiene que ir contra su conciencia. Que se fastidie y que tenga pesadillas por las noches por todos los engaños que se ha hecho a sí mismo y a la gente que vota a Podemos por desesperación y por desinformación, por desgracia, porque si estuvieran mejor informados ya no votarían a este engaño.

-Los votantes tampoco imaginarían que Podemos pactaría con Bildu…

No. Cuando pactan con EH Bildu están pactando con un partido que no sólo quiere romper la soberanía nacional de España, sino que no ha condenado la violencia que atenta contra los derechos humanos. El único compromiso ideológico en los estatutos de Podemos es defender los derechos humanos. El derecho humano más fundamental es el derecho a la vida y esta gente atenta contra él.

-¿Y cómo acogió que algunos compañeros de formación secundaran manifestaciones por la excarcelación de Otegi?

-Muy triste, pero también enfadado por la falta de altura moral de esta gente, heredera del partido de Madrazo, que contribuyeron a cargarse a IU en toda España. Es una especie de complicidad con el atentar contra la vida humana y la amenaza de muerte. Pactar con gente que defiende a los asesinos hace que muchos ya desconfíen de nosotros.

-Podemos se ha roto en Cataluña, pero también en otras provincias. ¿Existe la verticalización, el reparto de cromos y las purgas a sectores críticos que tantos exmilitantes denuncian?

Amiguismo, todo el que quieras. Es peor que los partidos tradicionales. PSOE, IU e incluso el PP tienen más pluralismo interno que Podemos o que Ciudadanos, que ambos pecan de lo mismo: de falta de democracia interna, de pluralismo. A ambos se les acusa nepotismo. Podemos es como Colau, que ha puesto a su pareja y padre de su hijo en un cargo importantísimo en el Ayuntamiento de Barcelona. Las exnovias de Pablo Iglesias están todas colocadas, las de Errejón también, como es el caso de la portavoz del Ayuntamiento de Madrid, la ‘asalta capillas’, una chica jovencísima sin la menor experiencia profesional. Purgas han hecho una barbaridad. Han destruido los círculos. Prácticamente no quedan círculos enteros. La famosa frase de Alfonso Guerra de que “quien se mueve no sale en la foto”, aquí se cumple aún más. Con el sistema electoral ultra-mayoritario que aplican, como en C’s, se impide que haya pluralidad. Toda la gente que prospera, tanto en el aparato del partido como en los puestos institucionales, es muy obedientes a lo que les diga el líder. Es un partido piramidal y jerárquico. Hay un hiperliderazgo de Pablo Iglesias. Va de arriba a abajo y el ascenso dentro del aparato no es democrático, sino seleccionado por cooptación. No lo eligen las bases, contrariamente a lo que dicen los estatutos y a lo que se nos vendió a todos los españoles hace casi dos años. Lo que hay es un sistema de tipo estalinista. El modelo de partido es estalinista, ultra-jerárquico.

-¿Qué otros errores han arrastrado a la formación a una situación demoledora?

La ambigüedad permanente al no quererse identificar como izquierdas, y andar escondiendo el programa, que van enseñando a cuentagotas. Quieren aparentar estar en el “centro del tablero”. También el ir desdiciéndose de promesas, propuestas que había de una cierta radicalidad, de un cierto cambio social…

-¿Y qué cambios debe acometer el partido? ¿En qué se debe sustentar su programa político?

Cumplir las promesas que hizo, con las que nos ilusionó a muchos, entre ellas la de democracia radical y de empoderamiento. En cuanto a programa político, un mayor compromiso con un programa de izquierdas claro, fiable, razonable, sensato y al mismo tiempo atrevido. Tienen que abandonar la alianza con grupos nacionalistas que lo que quieren es romper España porque esto hace imposible la justicia social. Si quiere hacer justicia social tiene que mantener la soberanía nacional del pueblo español. No se puede trocear la soberanía popular porque eso significa chantaje permanente de las zonas más ricas: “si me haces pagar, me voy”.

-¿En qué anda Unidos Sí, además de en destapar a Podemos?

Estamos recogiendo las firmas a las que nos obliga la reforma de la ley electoral. Intentamos concurrir a las autonómicas, pero no lo logramos y ahora estamos luchando por conseguir estos avales y poder representar a la gran mayoría de la izquierda española, que no son los vividores de la izquierda, sino la población que se siente española, que sabe que es necesaria la unidad de todos para hacer cualquier política progresista, y que pueden apoyarnos a través de nuestra web unidossi.es/aprobacion-formulario/. Hay unos partidos que dicen que son de izquierdas que sólo ofrecen autodeterminación, independencia, nacionalismo y se olvidan de la solidaridad. El PSOE, para apaciguar a los nacionalistas, está ofreciéndole más poder; blindaje lingüístico, lo que supone un adoctrinamiento de niños y jóvenes que les fanatiza; y más poder para la clase política corrupta. Su reforma constitucional asusta porque es ir a peor. Después, Podemos e Izquierda Unida son la locura absoluta porque dicen que Cataluña tienen derecho a la autodeterminación y que hay que hacer un referéndum. ¿Qué izquierda hay que recuerde que esto no es aceptable, sino al revés? Hay que recentralizar algunas competencias que se están gestionando muy mal. Hay problemas en la Justicia, Sanidad, Educación, puede ser una federación, pero con un Gobierno federal fuerte. Modestamente, la única izquierda sensata que hay en este momento somos nosotros. Crear un partido es algo muy difícil y si hacemos este esfuerzo es porque sabemos que es necesario porque no hay nada aceptable, ni siquiera el PSOE…

-¿El PSOE está en manos del PSC?

El PSOE es un clavo ardiendo al que se agarra la gente para no votar cosas peores, pero sí, está en manos del PSC. Es como si Iceta hubiera seducido a Pedro Sánchez y lo hubiera convertido en otro Iceta porque quiere para toda España lo que Iceta quiere hacer en Cataluña.

-Por cierto, ¿qué diría a los que en sus discursos deslizan el concepto de desobediencia civil cada dos por tres?

Que son unos tramposos, unos tahúres del Mississippi. Lo que hacen es sedición. Es un golpe de Estado civil, al estilo de la República Francesa. La desobediencia civil implica siempre que lo hace una persona sin poder, que no ocupa ningún cargo público y que el que desobedece asume con una enorme dignidad que pagará por ello yendo a la cárcel, con embargos, multas… toda clase de castigos que conlleva. No tiene nada que ver con lo que están haciendo desde el poder y con sueldos indecentes. La puso de moda Gandhi, con el que les gusta compararse, pero no tienen nada que ver con él, sino más bien con Tejero, Mussolini, Primo de Rivera padre, y con lo que hizo Companys en el 34.


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