Entre 800 y 1.000 euros. Eso es lo que cada español paga de más en impuestos gracias a la corrupción y al fraude fiscal, según el Sindicados de Técnicos de Hacienda, el Gestha.
La Información / Así, de acuerdo a las estimaciones de Gestha, solo la economía sumergida representa el 24,6% del PIB español, lo que supone más de 250.000 millones que no se declaran a Hacienda ni a la Seguridad Social.
Por otro lado, si se suma lo aflorado en las principales causas judiciales, desde el año 2.000, el coste de la corrupción en España sería de unos 7.000 millones de euros, según datos de Hacienda, aunque un estudio de la Universidad de Las Palmas eleva esta cifra a 40.000 millones. Por su parte, el profesor Luís Garicano, responsable económico de Ciudadanos, la estima en 200.000 millones.
Tomando como referencia la cantidad reflejada por Hacienda y se aplica el tipo de presión fiscal correspondiente, significa que 90.000 millones se dejarían de recaudar cada año. Por otro lado, si se incluyen las cotizaciones sociales que no se pagan, hablaríamos de casi 60.000 millones de euros de impuestos que no se pagan por no declararse. Si estas cifras se suman y se dividen por el número de personas que cotizan se traduce en que cada español está pagando entre 800 y 1.000 euros más al año en impuestos por la corrupción y el fraude.
1.108 casos de corrupción en 2015
Por otro lado, según el Ministerio del Interior, en 2015 se investigaron 1.108 casos vinculados a la corrupción, con el resultado de 2.442 detenidos. No solo eso, en la última memoria de la Fiscalía Anticorrupción se explica que hay abiertos 340 procedimientos penales y el Sepblac (el servicio contra el blanqueo de capitales del Banco de España) abrió 4.637 investigaciones en 2014, que continúan en 2015.
A nivel global, la ONU ha señalado que las actividades ilícitas en el mundo suponen el 2,7% del PIB del planeta y la Comisión Europea ha denunciado que el coste económico de la corrupción dentro de la UE es de 120.000 millones al año, es decir, el 18,3% del PIB.
Finalmente, el Banco Mundial ha calculado que los sobornos pagados cada año suponen más de un billón de dólares. Además, la corrupción supone el 10% del coste de los negocios en todo el planeta y es el 25% del precio de los contratos públicos en los países en vías de desarrollo.
