El Gobierno vasco quiere promover la convivencia en la región pero no alza la voz contra quien enaltece el terrorismo en cada una de las apariciones públicas que protagoniza. Se trata de Arnaldo Otegi. El dirigente de la izquierda abertzale ha dado muestras de su desfachatez este miércoles en el Parlamento vasco, donde ha mantenido una reunión con los miembros del grupo parlamentario de EH Bildu. «Hace aproximadamente 11 años que salí de esta casa. Más que salir voluntariamente, nos obligaron a salir entonces. Y ya entonces dijimos que un día volveríamos y, en mi caso al menos, hoy ha sido ese día en el que he podido volver a esta institución», ha alardeado después del encuentro. Fuentes de la Guardia Civil consultadas por Gaceta.es recuerdan a Otegi que salió del Parlamento «como consecuencia de la Ley» y consideran «descabellado» que pretenda «adaptar la Ley a su antojo». También le han exigido «que se dé cuenta de una vez de que lo que la sociedad vasca está demandando es normalidad».
‘Otegi no tiene escrúpulos’
El proetarra no ha tenido reparos en señalar que «no tengo ni la más mínima duda de que los sectores más retrógrados y más reaccionarios en el Estado español tratarán de impedir que mi candidatura prospere». Es un «honor» para él, ha añadido, «que los herederos del régimen franquista consideren que soy el elemento más peligroso y el peor lehendakari para sus intereses». Consuelo Ordóñez, presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) ha condenado estas palabras en declaraciones a Gaceta.es. «Otegi es una persona carente de escrúpulos, capaz de asegurar que no condena el terrorismo porque nunca lo ha hecho antes y capaz de llamar refugiados a miembros de ETA que huyeron de España para no pagar por brutales crímenes», ha denunciado. Ordóñez advierte que «quien abra las puertas de las instituciones a Arnaldo Otegi estará abriendo las puertas a la radicalización violenta» y pide que «todo el que vea compromiso y honorabilidad en la historia de ETA -como es el caso de Otegi- sea apartado de la vida pública».
Guiño a la formación comunista -Podemos-
Al igual que los simpatizantes de Podemos, el candidato a lehendakari por EH Bildu -formación que se niega a condenar a ETA y presenta a miembros de la banda terrorista como si fueran héroes- tampoco acepta los resultados electorales del 26J. «Hay un impedimento estructural para poder democratizar el Estado español. El Estado español no se va a democratizar», ha dicho, para continuar con un guiño al partido liderado por Pablo Iglesias. Otro más, pues el pasado mes de marzo el proetarra utilizó en varias ocasiones el lenguaje acuñado por Podemos durante el mitin realizado para celebrar su puesta en libertad tras seis años y medio de condena por intentar reconstruir Batasuna a las órdenes de ETA. En alusión a la formación antisistema ha señalado que sus críticas a los resultados del 26J «no se tratan de un reproche, sino de una apelación a aquellos sectores que están indignados y frustrados».
También se ha referido a la pérdida de más de 30.000 votos de EH Bildu, cuyo motivo sería que «se ha puesto el marco España frente al marco Euskal Herria y los votantes han entendido que lo que estaba en juego era el cambio de Gobierno en Madrid». En este sentido, se ha mostrado convencido de que «mucha gente que apoyará masivamente al independentismo de izquierdas en las autonómicas» dirigió su voto el domingo a tratar de impedir que Mariano Rajoy fuera reelegido presidente.
Información ofrecida por el diario La Gaceta.
