Inicio Cultura e Historia Cuando los milicianos demócratas de la II República echaban a los cristianos...

Cuando los milicianos demócratas de la II República echaban a los cristianos a los leones del Zoo

0

bandera-republica-manifestacion
Colabora con el periódico digital El Municipio con un donativo para seguir informando con un periodismo combativo en libertad
Pincha en el boton Donar. Muchas gracias por tu ayuda y colaboración.

Un padre de familia es sacado de su hogar, durante la II República, delante de su esposa e hijos, bajo la grave acusación de ser “católico”. Y a estos muchachos tan democráticos sólo se le ocurre llevar a su prisionero a la Casa de Fieras del Retiro (entonces allí estaba el Zoo de la ciudad de Madrid) y echarlo a los leones hambrientos que se lo comieron en un santiamén. ¡Qué chicos tan divertidos y tan democráticos! Practicaban la justicia revolucionaria a la que, de vez en cuando, le gusta aludir a Pablito Iglesias y la democrática Podemos.


Más información —Las 7 verdades demoledoras sobre la Segunda República


Uno de los hijos, que presenció la detención cuando era un niño, se hizo luego sacerdote. Durante toda su vida jamás le oyó nadie una palabra de venganza, ni tan siquiera de crítica hacia los asesinos de su padre.

Noticia relacionada —La Bandera Republicana una bandera de chiste, nacida de la equivocación

Así que luchemos contra el tópico -que no es mal empeño- y repitan conmigo: la II República sí asesinó a muchos. Sobre todo, cristianos. Los antiguos socialistas, comunistas y anarquistas se liaron a asesinar a cristianos, militares y fascistas varios… sin juicio previo. Simplemente. No les caían bien. Como le dijeron al protagonista de nuestro invento, de nombre Alfonso Muñoz Tejada, cuando preguntó a los milicianos por qué le detenían, estos respondieron:

-¿No es usted católico practicante? ¿No le parece a usted suficiente motivo?

En el entretanto, los gobiernos de izquierdas permitían y alentaban los crímenes.

Así que menos hablar de golpe militar franquista y más mirar hacia dentro. Siete mil sacerdotes asesinados; diez mil templos devastados; miles de familias católicas enlutadas

La II República fue una democracia, en efecto, pero una democracia homicida y sangrienta, especialmente cristófoba.

Información ofrecida por Eulogio López en el diario Hispanidad

Colabora con el periódico digital El Municipio con un donativo para seguir informando con un periodismo combativo en libertad
Pincha en el boton Donar. Muchas gracias por tu ayuda y colaboración.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí