En la noche de este miércoles hemos conocido que Jorge ha conseguido ganar el quinto MasterChef España ante Nathan que ha quedado segundo y Edurne en tercera posición.
Hace unos días, descubríamos el posible error de TVE al mostrar al ganador en el resumen emitido el pasado jueves, este miércoles, El Mundo ha desvelado más secretos de la producción del concurso de cocina.
Entre cosas, la publicación afirma que los aspirantes «cobran poco más de 1.000 euros al mes», durante los tres meses que tarda el programa en grabarse. Además, la productora se adueña de los derechos de imagen de los concursantes asegurándose un «30% los dos años siguientes» a la finalización del concurso:
«…El dinero lo cobran durante esos 90 días, después el contrato no incluye ningún pago más. Si quieren ganar dinero a costa de su paso por el concurso tienen que buscarlo ellos mismos, o bien, confiar en que el programa les busque algún contrato publicitario, alguna colaboración o algo similar…», cuenta la publicación.
Durante la grabación del programa, los concursantes viven en un chalet a las afueras de la ciudad de Madrid, completamente aislados y sin ser grabados por las cámaras. La vivienda consta de habitaciones en las que duermen hasta cinco concursantes y tres cuartos de baño. Además, no pueden comunicarse con el exterior, tan solo se les permite realizar una llamada de diez minutos o dos de cinco minutos por semana, siempre bajo la supervisión de un miembro del equipo para mantener la confidencialidad del concurso.
Al ser un programa grabado, el programa es sometido a decenas de cortes y montado hasta la saciedad:
«…Hablan de un ‘reality’ guionizado, montado y remontado, con concursantes a los que se favorece y otros a los que se perjudica, con escaletas marcadas y preparadas…».
Las grabaciones se realizan los lunes, viajan los martes y los jueves, y los fines de semana los concursantes reciben clases de cocina.
