Los sobrevivientes del incendio de la fábrica Tazreen Fashion, en los suburbios de Dacca, se sumaron a los miles de trabajadores que bloquearon una autopista en la zona industrial de Ashulia, donde están implantadas más de 500 fábricas de confección, que en su gran mayoría trabajan para marcas occidentales. «Los obreros de varias fábricas dejaron las fábricas y se sumaron a la manifestación. Quieren que los propietarios de Tazreen reciban un castigo ejemplar » , declaró el jefe de la policía de Dacca, Habibur Rahman.
Numerosas fábricas que trabajan para Walmart, H&M y C&A permanecieron cerradas para evitar una erupción de violencia. Los manifestantes pidieron que los patrones de Tazreen sean juzgados por el trágico incendio. El lunes los bomberos tuvieron que intervenir para combatir un nuevo incendio en una fábrica textil en Dacca, menos de 48 horas después del gigantesco incendio que dejó al menos 110 muertos. «El edificio de doce pisos alberga cuatro talleres diferentes y el incendio se declaró en la tercera planta. Podemos ver gente en el tejado», dijo un responsable de la policía de Dacca, Nisharul Arif.
Un centenar de personas sufrían heridas. Las víctimas murieron asfixiadas o al saltar al vacío, precisó la policía. Según Clean Clothes Campaign, asociación de defensa de los trabajadores textiles, con sede en Amsterdam, al menos 500 empleados de este sector ya ha muerto en diversos incendios desde 2006.
La Dirección Europea de C&A confirmó la relación contractual con Tazreen Fashion, desde que la compañía encargó la fabricación de 220.000 jerseys para ser entregados en C&A Brasil entre Diciembre de 2012 y Febrero de 2013. Bangladesh es uno de los centros de producción de prendas para la mayoría de las cadenas internacionales. El país es uno de los principales centros en Asia de producción textil, debido a los bajos salarios y a una abundante mano de obra. El incendio de Bangladesh nos dice mucho sobre las condiciones. No había salidas de emergencia. Los sueldos son de 21 céntimos la hora. Contratistas como Tazreen compiten unos con los otros por los pedidos. En la confección de ropa, la principal forma de cortar costos es cortar los sueldos y expensas como la seguridad.
Estos incendios son asesinatos industriales. Son consecuencia de un sistema productivo que ve las ganancias de una empresa multinacional de confección y de sus contratistas, más importantes que las vidas de las personas. La misma filosofía de ganancias-a-cualquier-costo está llevando al incremento de las protestas entre los trabajadores que venden estas prendas en Estados Unidos por mejores sueldos y condiciones de trabajo, especialmente en Walmart.
Los trabajadores han intentado ganar el derecho a organizar sindicatos militantes para mejorar sus sueldos y condiciones de trabajo. Si lo hubieran logrado, tendrían el poder de forzar a la compañía a construir salidas de emergencia y mejorar la seguridad de la planta. Pero la policía en Bangladesh ha reprimido manifestaciones de trabajadores en esta región desde hace meses. Un activista, Aminul Islam, fue torturado y muerto este año. El gobierno usa los sueldos bajos para atraer empresas como Walmart. Walmart usa el trabajo de las mujeres para incrementar sus ganancias, y tiene la misma actitud con relación a sus esfuerzos para organizar sindicatos que la que tiene con relación a los esfuerzos de sus empleados en Estados Unidos: completa oposición.
Este problema no es sólo de Bangladesh. El sistema de confección de ropa alrededor del mundo tiene a naciones compitiendo del mismo modo – Bangladesh en contra de China, por ejemplo-. Incendios en plantas son el resultado lógico porque la seguridad, los sindicatos y sueldos más elevados son costos que hacen a un país poco competitivo. Éste también es un problema en Estados Unidos. De acuerdo con el Instituto de Políticas Económicas, el déficit de Walmart en sus relaciones comerciales con China ya ha costado 200.000 empleos en Estados Unidos entre el 2001 y 2006.
Los empresarios alegan que si el costo de los sueldos y de seguridad se incrementan, también subirán los precios de las prendas en las tiendas estadounidenses. En el Black Friday (En EEUU es día de las rebajas después de Navidad), los consumidores de Walmart clamaron en favor de mejores sueldos y más derechos a los trabajadores de las tiendas de Walmart. ¿Harían lo mismo para los trabajadores de las fábricas de Bangladesh?. Los obstáculos son el sistema de contratistas, la competencia entre contratistas y países.
Solidaridad.net