Y aunque se aprecien signos de mejora, las cosas no están ni de lejos como deberían estar. España, junto a EE.UU, es el país en el que la desigualdad tuvo un mayor crecimiento, entre 2006 y 2010, provocada por la caída de los salarios en todos los sectores y el aumento del paro, cifras realizadas por el informe mundial sobre Salarios de la Organización Mundial del Trabajo (OIT).
El 90% del crecimiento de la desigualdad fue consecuencia de las variaciones de la distribución salarial y la pérdida de empleos, señala el informe. En los puestos posteriores se sitúan países como Brasil, Argentina o Rusia, donde las desigualdades se han reducido gracias al aumento de salarios y las oportunidades de empleo.
Los salarios, indica el informe, no han recuperado la evolución con la que contaban antes de la crisis, pero han experimentado un crecimiento de un 2% a nivel mundial, un punto porcentual debajo a lo que crecían en los años previos a 2008.
Se estima que el salario medio mensual en 2013 era de 3000 dólares en las economías desarrolladas y de 1000 dólares en los países de desarrollo.
Esta falta de crecimiento en 2013 respecto a 2012 se debe a factores como al decepcionante resultado de la recuperación europea y la economía japonesa.
En contraposición con la bajada de los salarios la productividad (valor de los bienes y servicios producidos por cada trabajador) está superando en los últimos años a la subida de los salarios.
Esta tendencia se traduce en una parte más pequeña del crecimiento económico y los propietarios del capital reciban mayores beneficios.
China protagonizó una incremento salarial debido a su tamaño y al crecimiento real del país, con su exclusión en el estudio, el aumento salarial mundial se reduciría del 2% al 1.1%.
Y es que el crecimiento salarial mundial fue impulsado por las economías emergentes mientras que en las economías desarrolladas fluctúa con cifras como un 0.2% en 2013.
Y es que la emigración hacia los países emergentes es cada vez mayor por parte de los habitantes de economías desarrolladas, que buscan salarios más altos y un estilo de vida digno. Estos emigrantes cogen de billetes de ida y un seguro como el de Axa Assistance y se embarcan a la aventura, buscando una mejor calidad de vida.
