El héroe militar español Bernardo de Gálvez ya ha sido nombrado ciudadano honorario de Estados Unidos tras la aprobación en el Senado de este país de ese reconocimiento póstumo. El Senado aprobó la pasada semana conceder la ciudadanía honoraria al militar y político español (1746-1786) por su contribución, en nombre de España, a la independencia de Estados Unidos. De hecho, este martes será colgado un cuadro con su imagen en el Capitolio en reconocimiento a su labor.
Agencias / Los trámites para ese homenaje empezaron el pasado 9 de enero en la Cámara de Representantes, que aprobó el texto legislativo meses después, el 28 julio. La propuesta fue entonces remitida al Senado, que ha acabado aprobándola en los mismos términos, de modo que sólo falta la firma del presidente estadounidense, Barack Obama, para que la norma entre en vigor.
El texto -promovido por dos congresistas republicanos, el representante Jeff Miller (Florida) y el senador Marco Rubio (Florida)- subraya que De Gálvez «fue un héroe de la Guerra Revolucionaria (Guerra de la Independencia de EEUU, 1775-1783) que arriesgó su vida por la libertad del pueblo de Estados Unidos».
El militar español «desempeñó un papel integral en la Guerra Revolucionaria y ayudó a asegurar la independencia de Estados Unidos», señala la resolución, al destacar que el homenajeado contribuyó con un «fuerte apoyo militar» a la lucha de las trece colonias británicas originales que se enfrentaron al Reino de Gran Bretaña.
En declaraciones a los periodistas, el embajador de España en Washington, Ramón Gil-Casares, subrayó que la concesión del citado título honorario al militar español es «absolutamente excepcional», pues únicamente se han dado «seis casos previos» en Estados Unidos.
«Este país habría sido independiente veinte años más tarde sin Bernardo de Gálvez», subrayó el embajador, quien valoró que «se ponga cara a la participación de España» en la Guerra de la Independencia de Estados Unidos.
«Falta que (la ciudadanía honoraria) la firme el presidente. No se ve razón especial para que Obama vaya a decir que no a esta iniciativa presentada por el Congreso», precisó Gil-Casares.
A fin de realzar la figura del héroe español en el país norteamericano, la Embajada de España va a organizar -entre otras iniciativas- «una gran exposición» y, en 2016, un congreso sobre «la presencia española en la independencia de Estados Unidos, con Bernardo de Gálvez a la cabeza», agregó el embajador,
Tras conocerse el respaldo del Senado a la ciudadanía honoraria del militar, el Hispanic Council, un centro de pensamiento con presencia en Washington y Madrid, subrayó que el título honorífico es «el mayor reconocimiento que un extranjero puede recibir».
El homenaje constituye «un inmejorable ejemplo de la oportunidad que tiene España para aprovechar la historia compartida con Estados Unidos para fortalecer las relaciones entre ambos países», afirmó el director del Hispanic Council, Daniel Ureña, en un comunicado.
Según Ureña, esa oportunidad cobrará especial significación en 2015, cuando «se celebrará el 450 aniversario de la fundación de San Agustín de la Florida por parte de españoles, la ciudad de Estados Unidos continuamente poblada más antigua del país».
Hace 231 años, los «Padres Fundadores» de Estados Unidos ya aprobaron homenajear a Bernardo de Gálvez con la colocación de un retrato suyo en el Congreso, junto al de figuras históricas como Thomas Jefferson o George Washington, pero nunca se cumplió esa decisión.
Por tanto, la instalación del cuadro, obra del pintor español malagueño Carlos Monserrate, este martes en el Capitolio supondrá el cumplimiento de ese compromiso expresado por el Congreso estadounidense el 9 de mayo de 1783.
Nacido en el pueblo de Macharaviaya (Málaga, España), De Gálvez ayudó a las colonias británicas con sus decisivas victorias sobre las tropas británicas en el siglo XVIII, en el marco del apoyo que España prestó desde el principio a la Guerra de la Independencia.
El héroe español, que ejerció como gobernador de la Luisiana y virrey de la Nueva España, tomó ciudades como Mobile y, después de un asedio de tres meses, Pensacola, que era la plaza fuerte de los británicos.
Una estatua ecuestre inaugurada en 1976 por el rey Juan Carlos de España reconoce a Bernardo de Gálvez en el centro de Washington. Según declaró el rey entonces, como se puede leer en el pedestal, la estatua «es un recordatorio de que España ofreció la sangre de sus soldados por la causa de la independencia estadounidense».