José María Aznar ha abierto la caja de los truenos en el Partido Popular de forma escalonada.
Aznar ha hecho pública esta misma mañana de lunes su opinión sobre el resultado del Partido Popular (PP) en las elecciones catalanas y las reacciones no se han hecho esperar. Si Aznar decía que el partido quedaba «el peor escenario posible» tras la debacle electoral, el candidato en Cataluña de su partido, García Albiol, respondía que «el peor escenario posible» es el que hay ahora mismo en Cataluña, con un presidente de la Generalitat «cuestionado en manos de la izquierda radical independentista». Albiol ha defendido su labor y la de su equipo de campaña electoral, ha exigido respeto y ha subrayado que los populares catalanes han tenido que trabajar en «condiciones muy complicadas» y con «una incomprensión totalmente inmerecida».
Por otro lado, las palabras del presidente honorífico invitando a reflexionar sobre el motivo por el cual «el partido del Gobierno no ha sido capaz de representar a la mayoría de las fuerzas constitucionales» han escocido sobremanera en Génova, la sede central del Partido Popular.
La actual presidenta de la Comunidad de Madrid ha rechazado vincular el resultado de los comicios de ayer con el Gobierno de la nación porque se trató de una convocatoria de elecciones autonómicas.
A la entrada de la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Popular que analiza los resultados de esas elecciones, Cristina Cifuentes, ha comentado a los medios de comunicación allí presentes que todo el mundo en el partido debe ser «constructivo», señalando; «Creo que las cosas las tenemos que decir dentro».
Su antecesora en el cargo la famosa, Esperanza Aguirre, al contrario que en otras ocasiones, no ha querido hacer declaraciones a su llegada a la sede central del PP, cosa que ha extrañado bastante a los medios de comunicación.
Sí ha hablado el presidente del Congreso Jesús Posada, y como no podía ser otra forma, no vaya a ser que pierda la silla, a defendido la postura de Cifuentes y Albiol para defender la línea oficial de Génova: «No conozco esas palabras pero indudablemente para ganar las batallas hay que darlas, pero yo sí creo que se ha dado una buena batalla en Cataluña».
Finalmente, la presidenta del Partido Popular en vascongadas Arantxa Quiroga, por su parte, ha considerado «injusto» cargar la responsabilidad del resultado sobre los hombros del presidente del gobierno de España y del PP, Mariano Rajoy Brey.
Las espadas siguen en alto para que se salve quien pueda dentro del partido, el que llegue el último perderá la silla y eso no gusta.