Pablo Iglesias era el invitado estrella de la edición de esta semana de Un tiempo Nuevo en Cuatro. Era la gran apuesta del programa para levantar la insuficiente audiencia con la que había acabado la temporada anterior. Sin embargo, lejos de conseguirlo el líder de Podemos ha llevado al programa a un mínimo histórico.
CHIC / Después de diez meses del supuesto plantón del político al programa, este viernes Iglesias decidió acudir al plató, pero a pesar de los numerosos titulares que dio en el programa, como que se veía «siendo el próximo presidente» o «los tirones de orejas» de Juan Carlos Monedero, no dio los frutos esperados. ¿Se ha desgastado la figura de Iglesias, antaño una apuesta segura para los espacios de debate?
Un tiempo Nuevo alcanzó un pésimo resultado de audiencia: 411.000 de espectadores y un 3,4% de share. En el programa anterior, que entrevistó a Artur Mas, el programa de Cuatro contó con 451.000 espectadores, es decir, un 3,8% de share.
Contra Pablo Iglesias juega además otro elemento en contra: a la misma hora que él intervenía en Un Tiempo Nuevo, Albert Rivera hacía lo mismo en La Sexta Noche, doblando los datos de audiencia de su competidor electoral.
Mientras Iglesias se conformaba con un escueto 5%, el líder de Ciudadanos doblaba la marca para llevarse un 10% de share en el espacio de la cadena rival. Puede que la audiencia no represente fielmente los votos, pero parece que el público siente ahora mismo un mayor interés por su rival electoral.
En la entrevista, Iglesias defendió que «Cataluña es una nación» y mostró a la audiencia su lado más íntimo. Con estos datos obtenidos solo queda creer que Iglesias ya no consigue enganchar al público y que atrás quedaron esos días en los que era el gran reclamo de las tertulias políticas.