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Otegi, detenciones y doctrina Parot: la primera legislatura sin víctimas de ETA

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Las elecciones del 20D pondrán el punto y final a la primera legislatura española sin víctimas de ETA. El anuncio por parte de la banda terrorista del cese de la violencia el 20 de octubre del pasado año 2011, apenas un mes antes de los comicios que auparon a Mariano Rajoy a la Moncloa, abrió un periodo de paz sin precedentes en la democracia española. Cuatro años sin atentados que han sido testigos de un difícil proceso de paz que ha incluido detenciones de miembros de la banda, la legalización de la izquierda abertzale, la condena a Arnaldo Otegi y la derogación de la doctrina Parot.


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La Vanguardia / Más allá de la victoria electoral del Partido Popular, la noticia del arranque de la décima legislatura fue el regreso de la izquierda abertzale al Congreso de los Diputados. Bajo la coalición Amaiur, los abertzales irrumpían en el Parlamento con siete diputados, un éxito electoral que prolongaba el cosechado en las elecciones municipales de mayo, donde Bildu se había hecho con el Ayuntamiento de San Sebastián y la Diputación gipuzkoana. Sin embargo, la izquierda abertzale tradicional no contaba todavía con una marca legal propia.

Dos meses antes de los comicios de noviembre de 2011, la Audiencia Nacional condenó al líder de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, a diez años de prisión acusado de pertenecer a ETA en grado de dirigente. Otegi, que llevaba ya dos años en la cárcel, había sido detenido junto a otros miembros de la izquierda abertzale en 2009 en el denominado ‘caso Bateragune’, acusados de reconstruir la mesa nacional de Batasuna. En mayo de 2012, el Supremo rebajaba la pena de Otegi a seis años y medio de prisión al considerar que no había argumentos para considerarlo dirigente de ETA.

Sólo un mes después y tras un recurso rechazado ante su ilegalización por el Tribunal Supremo, la izquierda abertzale tradicional volvió a contar con un partido legal propio. El 20 de junio de 2012 el Tribunal Constitucional legalizó Sortu con seis votos a favor y cinco en contra de la medida. El Gobierno de Rajoy cargó contra el fallo y en los meses siguientes hubo numerosas declaraciones pidiendo de nuevo la ilegalización. “A mi me hubiese gustado que siguiera siendo ilegal”, enfatizó el entonces ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón.

Fin de la doctrina Parot

Un tribunal, esta vez el europeo de Derechos Humanos, volvió a emitir en julio una sentencia contra la postura del Gobierno del PP. Estrasburgo declaró entonces que la denominada doctrina Parot, por la cual la reducción de penas por beneficios penitenciarios se aplicaba respecto a cada una de ellas individualmente y no sobre el máximo legal de permanencia en prisión, “vulneraba los derechos humanos” y era por tanto ilegal.


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Tras esta resolución, el Tribunal instó al Gobierno español a poner en libertad a la etarra Inés del Río quien, tras 18 años en prisión, tenía que haber abandonado la cárcel en 2008. Madrid presentó un recurso contra el fallo europeo pero Estrasburgo ratificó su decisión el 21 de octubre de 2013. Sólo un día después, Inés del Río abandonó la cárcel de Teixeiro, en La Coruña. Apenas un año más tarde, 63 presos de ETA habían sido puestos en libertad en virtud del fallo europeo.

Uribetxeberria Bolinaga

El movido verano de 2012 tuvo otro destacado caso relacionado con ETA. En agosto, el recluso de la banda Josu Uribetxeberria Bolinaga iniciaba una huelga de hambre tras diagnosticársele un cáncer terminal. En prisión desde 1997 por su implicación en el asesinato de tres guardias civiles y los secuestros del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara y el empresario Julio Iglesias Zamora, Bolinaga fue secundado en su huelga por otros 254 presos de la banda. En septiembre la Audiencia Nacional decretó su puesta en libertad en base a los informes forenses, que recogían que tenía un cáncer generalizado, terminal y en situación irreversible. Bolinaga falleció en enero de 2015 en Mondragón a causa del cáncer que padecía.

Las elecciones vascas de noviembre de 2012 supusieron el regreso del PNV a la lehendakaritza tras cuatro años de gobierno del socialista Patxi López y la exhibición de músculo de la izquierda abertzale, que se situó como segunda fuerza en la Cámara de Vitoria. Por otro lado, en 2012 hubo 32 detenidos relacionados con ETA. Se cumplían entonces casi tres años del último asesinato de la banda, perpetrado en marzo de 2010, en el que policía francés Jean-Sergé Nerin fallecía tras un tiroteo con miembros del grupo terrorista que intentaban robar en un concesionario de Dammarie-les-lys.


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Las detenciones en el entorno de la banda se han sucedido a lo largo de la legislatura y, en septiembre de 2013, tuvo lugar una gran operación policial en la que fueron arrestados en Euskadi y Navarra 16 miembros de Herrira, el colectivo de apoyo a presos de ETA. 2013 fue precisamente el año con más arrestos relacionados con la banda en toda la legislatura, con un total de 51.

Desarme parcial y detención de la cúpula

En febrero de 2014 se produjo uno de los momentos mediáticamente más importantes del proceso de paz. En rueda de prensa en Bilbao, la Comisión Internacional de Verificación dio a conocer el “compromiso” de la banda de realizar un desarme. Según los verificadores, sólo un mes antes la banda había sellado y puesto fuera de uso armas y distintos materiales para la fabricación de explosivos. Sin embargo, el escaso material aportado por la banda fue motivo de críticas por parte del Gobierno, que nunca ha reconocido a los verificadores. “El tiempo del teatro ya ha pasado”, se aseguró entonces desde Moncloa.

Aunque coincidió en que era un “paso insuficiente”, el Ejecutivo vasco consideró que éste iba “en buena dirección” e instó a Madrid a colaborar en el desarme de la banda, algo a lo que el Gobierno central siempre se ha negado. El equipo de Urkullu, muy crítico con la actuación en el proceso de paz del Gobierno de Rajoy, también ha reclamado en numerosas ocasiones pasos en materia penitenciaria, reclamando sobre todo el fin de la dispersión.

Actualmente hay 455 presos de ETA distribuidos en su gran mayoría en cárceles de España y Francia. A lo largo de la legislatura, casi 250 han salido de prisión. La cárcel más alejada del País Vasco es el complejo penitenciario de El Puerto de Santa María I, II y III, que se encuentra a 1.020 kilómetros de Euskadi.

Ya en septiembre de este año, 2015, se produjo una de las detenciones más importantes contra la banda. En un caserío del País Vasco francés fueron arrestados los etarras David Pla e Iratxe Sorzabal, la considerada cúpula de ETA. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, calificó la operación como el “acta de defunción” de la banda. En los cuatro años de legislatura se han llevado a cabo un total de 160 detenciones de personas relacionadas con ETA.

Quiroga, convivencia y desarme

El final del primer mandato de Rajoy llega con la crisis interna del PP surgida a raíz de la propuesta de la ya expresidenta de la formación en Euskadi, Arantza Quiroga, de crear una ponencia de paz que tendía la mano a la izquierda abertzale. La dirigente ‘popular’, que en su iniciativa sustituía el término ‘condena’ del terrorismo por ‘rechazo’ para facilitar acuerdos con los abertzales, fue desautorizada por la dirección de su partido y, apenas un día después de presentarla, retiró su iniciativa. La semana siguiente dimitió. “El PP debe pasar de la resistencia a la influencia”, aseguró en su despedida.

La propuesta de Quiroga, aplaudida por PNV y EH Bildu, parecía el mecanismo capaz de reavivar los pasos en materia de paz, un camino difícil en el que la estancada Ponencia de Paz del Parlamento vasco evidencia las complicaciones para avanzar y acercar posturas en el nuevo escenario vasco surgido a raíz del cese de la violencia. La primera legislatura sin asesinatos de ETA se cierra con muchos asuntos en el tintero a los que el gobierno que salga de las urnas del 20D se tendrá que enfrentar: el desarme y disolución definitivos de la banda, la política penitenciaria, el reconocimiento de las víctimas y la consolidación de la convivencia en el País Vasco.

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