El joven Luis Ortiz, de California, llevaba sufriendo fuertes dolores de cabeza durante algo más de tres meses y tenía otros síntomas que le llevaron a ir finalmente al hospital de urgencias, aunque en un primer momento no le dio importancia, para averiguar qué era lo que le estaba pasando.
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Lo que los facultativos descubrieron después de hacerle pruebas fue al tiempo sorprendente y terrorífico para los médicos. Ortiz necesitaba con urgencia una cirugía de forma inmediata para quitarle una larva, según recoge USA Today. El doctor que le trató, Soren Singel, ha comentado en diferentes medios de comunicación que otros 30 minutos y el joven “habría estado muerto”.
Singel contó al periódico Napa Valley Register que la larva estaba bloqueando el fluido de líquidos a varias partes del cerebro de Ortiz.
La razón por la que la larva habría llegado a su cerebro podría estar en algo que el paciente comió, posiblemente una ensalada u otro plato que contenía comida que no había sido lavada y tenía huevos de larva.
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Los huevos de larva que llegaron al estómago de Ortiz fueron a parar a su cerebro.
El joven contó que había tenido mucha suerte: “Estoy agradecido por todo lo que los médicos han hecho por mí”.
Por el momento, Luis Ortiz ha tenido que dejar la universidad y volver a casa de sus padres porque no puede ni trabajar ni conducir. “Estoy deseando poder volver a conducir y salir con mis amigos”.
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