La intención de voto al Partido Popular ha experimentado un descenso de dos puntos, al situarse en el 26,9 por ciento, en relación con los resultados obtenidos el pasado 20 de diciembre, según el estudio de intención de voto y popularidad de líderes que públicamente mensualmente el Instituto Simple Lógica. Según este informe, el PSOE y Podemos han experimentado ligeros descensos y Ciudadanos e Izquierda Unida han subido.
Agencias / El estudio correspondiente al mes de febrero refleja que el PP sigue siendo la primera fuerza política, pero con un descenso de casi dos puntos en relación con el 20D, cuando alcanzó el 28,72 por ciento del electorado. También refleja una caída de casi tres puntos si se compara con el índice de Simple Lógica del mes de enero, fecha en la que alcanzó un 30 por ciento.
El PSOE, por su parte, experimenta un ligero descenso si la comparación se realiza con el 20 de diciembre, ya que en esa fecha logró el 22,01 por ciento y en el barómetro de febrero se situó en el 21,7 por ciento. Pero si la comparación se hace con el barómetro de enero que realiza Simple Lógica, refleja una recuperación de más de un punto, ya que el mes pasado se situó en el 20,4 por ciento.
Ocurre algo parecido con Podemos, que pierde unas décimas, del 20,66 al 20,3 por ciento, si la comparación se hace con el resultado electoral y refleja una pérdida de un punto si la comparación se hace con los datos de hace de enero, cuando lograban el 21,3 por ciento de los votos.
Sin embargo, la cuarta fuerza política que salió de las elecciones del pasado 20 de diciembre, Ciudadanos, logra situarse cinco puntos por encima de su resultado electoral, al pasar del 13,98 por ciento al 18,9. Cuatro puntos si la comparación se hace con el dato registrado por este barómetro en enero. Y también mejora ligeramente Izquierda Unida, del 3,67 por ciento al 5,1, más de punto y medio sobre sus resultados del 20D y unas décimas con relación a enero, donde registró un 4,8 por ciento de apoyos.
El informe de Simple Lógica argumenta que la «proximidad» de las elecciones generales -no hace aún dos meses de su celebración- hace que las transferencias de voto entre partidos sean «todavía reducidas». No obstante, este estudio considera que los datos son «relevantes» al menos como «indicios de posibles tendencias de futuro» y «reveladores del impacto de los actuales procesos de negociación en pos de la gobernabilidad».
Baja tasa de fidelidad a PP y Podemos
De hecho, la conclusión de los responsables del estudio viene avalada también por la tasa de fidelidad de los partidos -es decir, el porcentaje de votantes en la última convocatoria electoral que se muestran dispuestos a votar a esta formación-, que en el caso del Partido Popular ha bajado y en el del PSOE ha subido. Así, la tasa de fidelidad de los populares se sitúa ahora en el 76,3 por ciento, casi 10 puntos menos que la de hace un mes, que estaba en el 86,9 por ciento.
Además, en el caso de este partido, el informe considera «importante tener en cuenta» que un 11 por ciento de los votantes del PP se muestran dispuestos a votar al partido de Albert Rivera, mientras que hace un mes ese porcentaje era del 3,3 por ciento. Estas variaciones explican «en gran medida, la pérdida de apoyos del PP» y el «fortalecimiento» de Ciudadanos.
La tasa de fidelidad del PSOE es más baja que la del PP, se sitúa en el 69,9 por ciento, pero ha registrado un incremento superior a los dos puntos desde el mes de enero. Cabe destacar que en el caso del PSOE, el porcentaje de votantes indecisos está en el 12,8 y «más alto» que el de otros partidos: los indecisos del PP son el 7,4; los de Podemos, el 7,4 y los de Ciudadanos, el 7,8.
Y también es «reseñable» que entre los votantes socialistas es superior al del resto de partidos los que declaran su abstención de abstenerse, votar en blanco o votar nulo. Esa proporción es del 7,2 por ciento frente al 3,7 por ciento del PP, o el 2,5 por ciento de Podemos. Además, también refleja que podría haber transferencia del PSOE a Ciudadanos, ya que el 5,2 por ciento del electorado socialista del pasado diciembre declara en el estudio que ahora votaría a Ciudadanos. Mientras que hace un mes sólo declaraban lo mismo un 2,5 por ciento.
En cuanto a la tasa de fidelidad de Podemos, esta ha experimentado un descenso de casi cinco puntos, al pasar del 82,4 por ciento de hace un mes al 77,5 por ciento actual. En este caso las pérdidas de apoyos más relevantes, aunque reducidas, se producen hacia Ciudadanos en un 4,3 por ciento y hacia IU, en un 4,0 por ciento, frente a 0,8 por ciento y 2,4 por ciento que se registraba hace un mes respectivamente.
Baja la tasa de fidelidad a Ciudadanos
El sondeo también refleja que ha bajado la tasa de fidelidad de voto de Ciudadanos en más de cuatro puntos, situándose en el 78 por ciento frente al 82,4 por ciento de hace un mes. Y aquí se apreciaría un trasvase con el PP, ya que un 4,7 por ciento de los votantes de Rivera declaran su intención de apoyar al PP, pero ese porcentaje es «ampliamente compensado» con el que se produce en sentido contrario, reflejado en esta encuesta.
También Izquierda Unida experimenta un ligero descenso de votantes que estarían dispuestos a volver a apoyar a la formación de Alberto Garzón. Es de algo menos de dos puntos. Sus principales pérdidas se van a Podemos en un 6,8 por ciento, pero están ampliamente compensadas por las que recibe de esa misma formación, y las de quienes no declaran cuál será su comportamiento electoral o que nos prestarán su apoyo a ninguna candidatura, el 19,3 por ciento.
Albert Rivera, el líder con mayor aprobación
En cuanto a la valoración de los líderes, Albert Rivera es el que tiene mayor nivel de aprobación a su actuación política y además, en febrero, «refuerza» su posición. Pedro Sánchez se recupera del descenso sufrido en el mes de enero, según este barómetro, y empeoran las valoraciones del resto de los líderes con mayor respaldo electoral.
El líder de Ciudadanos cuenta con la aprobación del 51,1 por ciento, con una mejoría de casi cuatro puntos en su valoración. Este nivel de aprobación no ha sido lograda por ninguno de los líderes de las fuerzas mayoritarias en las últimas legislaturas. Rivera cuenta con la aprobación del 92,2 por ciento de los votantes de su propio partido, muy superior a la que se observa entre los votantes del resto de las fuerzas políticas. Y además, su actuación recibe la aprobación del 71,8 por ciento de los votantes del PP y del 53,1 por ciento del PSOE.
El segundo líder mejor valorado es Alberto Garzón, con un apoyo del 37,3 por ciento de la ciudadanía, aunque ha bajado 3 puntos en relación con enero. Pero cuenta con la valoración favorable del 63,3 por ciento de los votantes de Podemos. La valoración de Pablo Iglesias también ha empeorado en 6,5 puntos si se compara con la que tenía en enero y se sitúa en el 27,5 por ciento. De hecho, el porcentaje de votantes de Podemos que le valoran positivamente ha bajado en diez puntos y se sitúa en el 80,8 por ciento.
El cuarto mejor valorado es el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que ve aprobada su actuación por el 27,3 por ciento de los ciudadanos, lo que supone un empeoramiento de tres puntos en su valoración con respecto a hace un mes. También entre los votantes del PP ha bajado la aprobación en seis puntos y se sitúa ahora en el 81,8 por ciento.
El peor valorado es Pedro Sánchez, con un 27,2 por ciento de aprobación, pero en este caso se observa una «clara recuperación» de cuatro puntos de la valoración de su actuación política con respecto al mes de enero. El líder del PSOE es bien valorado por el 66,6 por ciento de los votantes socialistas, seis puntos más que hace un mes.