Los números telefónicos no son infinitos y es por este motivo que hay que actualizarlos y otorgar nuevos rangos de numeración que permitan cubrir la demanda creciente. Esto es lo que está sucediendo en Madrid y Gipuzkoa. Sobre estos dos lugares, la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) advierte que el ritmo de ocupación de la numeración ha sido muy superior a lo previsto y que es urgente que se asignen nuevos rangos para cumplir la demanda
La Vanguardia / En el caso de Madrid, que cuenta con el actual prefijo 91, las dos posibilidades son abrir el nuevo prefijo 81 o atribuirle el rango 919 (más un número de seis cifras). En el caso de Guipúzcoa la situación es similar al actual prefijo geográfico 943 se le uniría el 843, según el informe que le remitió la CNMC a la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información el pasado 21 de julio.
En el último Plan Nacional de Numeración de 2015, se atribuyeron 86,5 millones de números a las diferentes provincias, de los que ya se han ocupado el 79,8%. Todavía quedan libres 17,5 millones de números, por lo que, como señala la CNMC, en el cómputo global “no hay riesgo de agotamiento en el medio plazo”.
No sucede lo mismo en todas las provincias. Se trata de una distribución geográfica y hay lugares donde la ocupación está por encima de la media, como Madrid con un 97%, seguida de Gipuzkoa (91%) y Málaga (90%). La lista sigue con varias provincias que están por encima del 80% de ocupación, están Alicante (87%), Badajoz (87%), Valencia (87), Cádiz (86%), Barcelona (86%), Sevilla (85%), Lleida (85%), Navarra (84%), Castellón (83%), Burgos (83%), Huelva (82%), Coruña (81%), Almería (81%), Ciudad Real (81%) y Jaén (81%).