El pasado domingo ESdiario les adelantaba en rigurosa primicia que el ya ex secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, mantendría su escaño en el Congreso y que esta semana «desaparecería» del mundanal ruido y de la escena pública para realizar un viaje, una escapada, junto a su mujer Begoña Gómez. Era cuestión de tiempo que trascendiese el lugar de vacaciones de la pareja y agrandar así la «fama» de «vividores» que se ha alimentado durante este último año con varias e indiscretas fotos de sus «desapariciones» vacacionales en momentos nada oportunos políticamente hablando.
Este fin de semana tenemos ya las primeras imágenes de la pareja en el Aeropuerto Adolfo Suárez Barajas, descansando en una cafetería en la zona de salidas internacionales a punto de tomar un avión. Con indumentaria desenfadada, cazadora de cuero y la típica mochila de viajero, Sánchez fue visto por muchos usuarios de la T4 madrileña que aprovecharon el encuentro para «robar» unas cuantas fotografías. Bien es cierto que no se sabía el destino hasta poco antes de partir su vuelo, en este caso uno con destino a Los Ángeles, puerta de embarque donde fue vista la pareja, junto a sus hijas, poco después de tomar un refrigerio en una de las cafeterías de la terminal.
Pese a que seguro que la pareja lo ha querido evitar -Pedro Sánchez aparece con un antifaz en el avión de los que se usan para evitar la luz y poder así echar una cabezada en este tipo de vuelos tan largos- ya hemos visto fotografías u otro tipo de documento gráfico, como este vídeo, de Sánchez a bordo del largo vuelvo transoceánico que le traslada a unos días más de asueto, y van unos cuantos, en pleno curso político. El ex líder socialista embarcaba a las 12 del mediodía en el vuelo Iberia 6171. Vean el vídeo a continuación difundido por la Cuarta Columna.
Pedro Sánchez tomaba así rumbo a la ciudad de las estrellas cinematográficas en plena crisis socialista y en una semana en la que por supuesto ha habido actividad parlamentaria, con Pleno en el Congreso de los Diputados -como el de este martes- al que el ex líder socialista no asistió en un ejemplo claro de absentismo laboral en pleno curso político y con el futuro de España todavía por decidir.
Lógicamente las nuevas vacaciones de la pareja han suscitado ya las primeras reacciones negativas en las redes sociales y sobre todo, según ha constatado ESdiario, las críticas internas en su partido por transmitir de nuevo, o eso entienden, cierta imagen de irresponsabilidad y frivolidad. Lo cierto es que Sánchez se ha abandonado las tareas de diputado -el único salario que ahora percibe- en un claro ejemplo de absentismo laboral. No es un buen ejemplo.
