Hace ya tiempo que, por fortuna, desterramos la idea de que el cuidado de la piel es algo poco masculino y asumimos que un buen aspecto es fundamental para nuestra autoestima y para afrontar con confianza nuestro día a día. La piel no solamente es la barrera que nos protege contra las agresiones externas; es también nuestra mejor carta de presentación. Un rostro bien cuidado nos proporciona una apariencia saludable y aseada, contribuyendo de este modo a proyectar confianza, seguridad y credibilidad ante los demás. Por este motivo, resulta imprescindible incluir en nuestra rutina diaria de higiene una serie de pautas que contribuyan a mantener nuestra imagen impecable.
Los hombres ya no nos cuidamos sólo por coquetería: el deseo de mostrar la mejor versión de nosotros mismos nos hace fijarnos en cuestiones que antes pasaban inadvertidas: rojeces, acné, manchas o imperfecciones son ahora aspectos a tratar, cuando antes no pasaban de meras molestias. Por fortuna, la industria cosmética se ha propuesto ayudarnos a conseguirlo, desarrollando líneas adecuadas a nuestra piel, muy distintas a las de nuestras compañeras. Así que, si eres de los que comparte las cremas con tu novia o mujer, ve abandonando tan nefasta costumbre: es hora de renovar tus productos de cuidados para el rostro.
Toda rutina de cuidado facial ha de comenzar por una buena limpieza. Destierra definitivamente la pastilla de jabón de manos para estos menesteres: si quieres lucir un rostro impecable, emplea productos específicamente diseñados para ello. Como mínimo una vez por semana te recomiendo que emplees una crema o gel exfoliante para eliminar las células muertas y liberar los poros obstruidos por la polución o el sudor. Así, evitarás la aparición de molestos granos e impurezas.
Evidentemente, tras un tratamiento como este, que sin ser agresivo, sí que elimina parte de la protección lipídica de tu cutis, es necesario hidratar bien. En este punto sí que hay que ser muy cuidadosos, no improvisar y atender siempre a las recomendaciones de los expertos. La calidad del producto seleccionado marcará el resultado, tanto a corto como a largo plazo. Busca líneas especializadas como las de la casa Nu Skin (Nu Skin – Wikipedia, la enciclopedia libre), líder en cuidados específicos para la piel. Ahora que has decidido emprender el camino del cuidado personal, siempre será preferible acudir a marcas de confianza, ¿no?
La piel del rostro masculino presenta dos focos principales de atención: la zona de la barba y el contorno de ojos. Si sueles afeitarte, tu piel mostrará el cansancio lógico de sufrir el constante paso de una cuchilla por su superficie, por lo que el empleo de un buen after-shave previo a la crema hidratante se convierte en imprescindible. La zona del contorno de ojos es la que, en los hombres, revela con mayor descaro el paso del tiempo: arrugas, bolsas, ojeras… es el momento de tomar las riendas de tu aspecto y atajar los potenciales problemas con un producto específico.
¡Sigue estos consejos y experimenta la alegría de ver en el espejo una versión mejorada de ti mismo cada día!
