Los Mossos d’Esquadra han detenido a primera hora de este viernes a la alcaldesa de Berga (Barcelona), Montse Venturós (CUP), investigada por un presunto delito electoral al no haber retirado la ‘estelada’ del Ayuntamiento. No obstante, la detención solo se ha llevado a cabo para que comparezca en el juzgado, tras ignorar la citación por dos veces.
De esta forma, la alcaldesa, una vez ha sido detenida, ha comparecido ante el juez para responder de dos delitos electorales y otros cuatro de desobediencia. Venturós ha defendido que mantuvo colgada la estelada en el Ayuntamiento durante dos citas electorales cumpliendo un «mandato popular». A la salida del juzgado, ha declarado a los periodistas que ha sufrido un ataque «absolutamente antidemocrático e insultante contra el pueblo catalán» y no sólo un ataque a las instituciones, por «el simple hecho de tener una bandera colgada en el consistorio».
Los Mossos d’Esquadra recibieron ayer por la tarde la orden de detener a Venturós y de trasladarla al juzgado, aunque el escrito no especificaba los motivos del arresto, han señalado a Efe fuentes policiales. El diputado de la CUP Benet Salellas, que también es el abogado de Venturós, ha lamentado que los Mossos hayan actuado en un contexto de máxima vulnerabilidad: «Se ha buscado un momento en el que estaba sola», ha apuntado.
En ese sentido, ha criticado que haya sido detenida de madrugada y en su domicilio, ya que en su opinión debería haberse hecho de día y en su lugar de trabajo: «Merecía otro trato por parte de los Mossos», ha considerado.
Salellas, que ha hablado por teléfono con Venturós a las 7.30 horas, ha asegurado que se desplazará a Berga la mañana de este jueves para seguir el caso.
Por su parte, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha sido una de las primeras representantes institucionales en reaccionar a la detención de la alcaldesa, al escribir en su cuenta de Twitter: «Todo el apoyo a Montse Venturós. Ni la judicialización de la política ni los tribunales impedirán que los catalanes/as decidamos nuestros futuro».
También el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, se ha sumado al apoyo a Venturós y, ha escrito en su cuenta de Twitter, «a los cargos electos que sufren persecución por sus ideas».
Venturós está siendo investigada por negarse a retirar la bandera del consistorio como se le requirió durante las elecciones catalanas y las autonómicas, y en dos ocasiones se ha negado a acudir a declarar ante el juez.
No acudió al Juzgado de Instrucción 1 de Berga tras ser citada por primera vez el 5 de abril ni en el segundo requerimiento, el 17 de octubre, tras lo que afirmó que declararía «ante el pueblo» por considerar que es a quien se debe.
En ese sentido, apuntó en un comunicado: «Reitero mi voluntad de no esquivar el desafío del Estado. La independencia la conquistaremos demostrando que la legitimidad de las urnas quiere ser silenciada por una legalidad que ya solo acepta una minoría».
El Ayuntamiento de Berga argumentó que su decisión de hacer caso omiso de los requerimientos de la Junta Electoral Central de retirar la ‘estelada’ responde también «a la voluntad popular ya que se trata de un acuerdo aprobado en el pleno del 6 de septiembre de 2012».