Por Eduardo López Pascual para elmunicipio.es
Hace unos días un gran amigo que viene de la izquierda me hizo un valioso regalo en forma de un par de libros escritos por Stépfane Hesse, un hombre que hizo de su vida ejemplo de compromiso contra un mundo sumido en una ola de injusticias, de falta de libertades y de duras dictaduras impuestas por los fascismos de la época o de los regímenes stalinistas que, en los años 40 del siglo pasado, campaban en Europa. Luchador infatigable frente al nazismo de la Francia de Vichy, (escapó de la Gestapo en Buchenwald), pasó a ser miembro activo del Consejo Nacional de la Resistencia bajo la dirección del General De Gaulle, ocupando tras la liberación, distintos cargos diplomáticos como representante ante la ONU, más tarde en 1948 forma parte del equipo redactor de la Declaración Universal de Derechos Humanos; luego embajador de Francia ante la ONU en Ginebra y desde siempre defensor de las políticas de justicia social, o de leyes que frenaran los desmanes de un capitalismo depredador..
Stepfane Hesse, pronunció muchos discursos en esta línea y ya, en el atardecer de su vida, escribió dos libritos, “Indignaos”, y “Comprometeos”, como resumen de toda una vida dedicada a defender los valores más sagrados del hombre: su libertad, la justicia, y su testimonio contra un capitalismo puro y duro, que marcaron desde siempre su actitud en la sociedad. Ya, en su tiempo como miembro del CNR, colaboró en la redacción del programa que La Resistencia ofrecía a Francia. Nacionalización de la banca, de las industrias estratégicas, servicios públicos en Sanidad y Educación, una Seguridad Social, etc. En realidad, un compromiso sociopolítico que era suscrito en marzo de 1944. Hesse, se declaraba adalid de unas exigencias que, por cierto, ya defendía en España, diez años antes, José Antonio y la Falange. Es ahí donde se encuentra a Ceferino Maestú, que hoy recordamos su reciente fallecimiento (1920-2016). Un falangista de la primera hora, y de la primera línea, en cuanto a compromiso y convencimiento por la causa de la justicia social, de oposición al capitalismo depredador de hombres y pueblos, vivió en paralelo al activista francés. Por eso, por ver una real semejanza entre el Stépfane, de la Resistencia, y el Ceferino Maestú del compromiso revolucionario falangista, del luchador incansable, preso en el franquismo, traigo aquí esta reflexión política, porque él, durante su vida, marcó también un grito de rebeldía frente al orden economicista que se nos imponía. Ceferino no escribió títulos como los de Hesse, pero si dejó su testimonio por una sociedad basada en los valores y principios del nacional sindicalismo de la Falange y de su revolución, que hoy nos resulta imprescindible para reconocer su magisterio y su compromiso.
Como Hesse, un hombre de la izquierda, Ceferino ofreció durante toda su vida un ejemplo de lealtad a la Revolución azul visto desde una izquierda de alma cristiana, y lo expresó muy bien en una obra tan completa y magnífica como “Los enamorados de la revolución”. que la Plataforma 2003 publicó hace unos años. Desde luego su lectura empujaba, nos empuja, ardorosamente a una actitud de rebeldía frente al fraude que supuso el régimen del 18 de julio y la sociedad domesticada que nos vino. De su vida profesional, todo se sabe: periodista, fundador de Agencias de Noticias, de revistas como “Sindicalismo” -(prohibida en seguida)-, pero a la par, un escritor para el pueblo lejos de los cauces comerciales del mercado, y ahí quedan sus libritos escritos en forma artesanal: “La Falange que quiso ser de los rojos-rojos y de las JONS” o “José Antonio no ha muerto está ahí”, que componen sin duda un grito, a lo Paul Klee, para llamarnos al Indignaos y al comprometéos de Stépfane Hessel. Por eso, esta doble referencia en el luto por Ceferino Maestú, ya que dentro de la órbita azul, ha representado la rebeldía más auténtica, la llamada a la indignación y al compromiso hasta el último aliento vital. Ceferino para mí, y creo que para muchos falangistas, es un constante motivo de orgullo por contar con hombres de su categoría moral y su valentía social y política.
Más información sobre Ceferino Maestú
—Ceferino Maestú Barrio entrevistado por elmunicipio.es (I parte)—
—Ceferino Maestú Barrio entrevistado por elmunicipio.es (II parte)—
—Ceferino Maestú Barrio decía hace 6 años—
—Ha fallecido el falangista cofundador de Comisiones Obreras (CC.OO), Ceferino Maestú Barrio—
Ceferino Maestú Barrio fue desde el primer día en que adquirió su compromiso nacional sindicalista, el hombre indomable, el camarada incansable, el faro humano y político para generaciones de seguidores joseantonianos, que vieron en su figura, esa indignación y ese compromiso trasmitido desde un convencimiento de paz y democracia, que el activista francés demandaba en sus textos. La violencia a pesar de la justificaciones que algunos, como Sartre, hacen (en la insurrección argelina), no es más que un fracaso, diría después el propio Sartre, y además no es eficaz, tal como lo explica Hesse y certifica con sus actos Ceferino Maestú, hijo de ejecutado en nuestra guerra civil, perseguido por Franco, rechazado por los fantasmones del Movimiento, pero lleno de una ética que, personalmente, declaro espejo para mirarnos. Gracias Ceferinio por tu ejemplo.
Excelente artículo, Eduardo.Totalmente de acuerdo contigo en todo lo que has escrito.
Ceferino no dejó nunca de darnos una lección a todos los joseantonianos. Hasta el último minuto luchó por la unión de todos los falangistas.
No se podía expresar mejor lo que significa el ejemplo magnífico que nos dejó Ceferino. El movimiento sindical tiene una gran deuda con este falangista inconformista que luchó en plena dictadura por un frente sindicalista democrático y unido. ¡Bravo, Eduardo!