La actriz Sarah Silverman ha causado una gran polémica en Estados Unidos al publicar en su cuenta personal de la red social Twitter un comentario en el que apuesta directamente por un golpe de Estado para derribar al presidente estadounidense Donald Trump.
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Sarah Kate Silverman de 46 años de edad es una comediante, actriz y escritora estadounidense de origen judío. Aunque normalmente llamada Sarah Silverman, algunas veces es llamada por su apodo Big S o Sarah ‘Big S’ Silverman.
Sarah cursó estudios de secundaria en la Derryfield School en Mánchester, Nuevo Hampshire y vivió en Bedford, New Hampshire.
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En su comedia satírica, trata los temas tabú sociales, y asuntos polémicos tales como el racismo, sexismo y religión.
“…Levántate y únete a la resistencia. Una vez los militares estén con nosotros, los fascistas serán derrocados. Fuera el rey loco y sus manipuladores, adiós…”, este es el mensaje que de actriz estounidense en su cuenta de twitter y que rápidamente han publicado varios medios de comunicación nacionales e internacionales en las principales redes sociales por la amenaza del mensaje.
Multitud de usuarios de las redes sociales le han reprochado su apología del golpismo, pero lo más alarmante es la cantidad de apoyos que ha recibido Silverman. En estos momentos miles de usuarios han marcado el tuiteo con el famoso “Me gusta”. Y luego aún hay quien dice que el peligro para la democracia estadounidense es Donald Trump…, y es que existe gente para todos los gustos.
La actriz se declaró públicamente como votante de la abortista Hillary Clinton
Sarah Silverman ya ha provocado polémicas en Estado Unidos con anterioridad, especialmente por hacer comentarios cómicos cargados de tópicos racistas sobre los judíos y los negros. En las primarias del Partido Demócrata la actriz apoyó al radical Bernie Sanders, y tras la derrota de éste, en el mes de mayo afirmó: “…Yo votaré menos inspirada pero totalmente segura por Hillary…”, comentaba la actriz.
Podríamos sugerirle a esta actriz un atentado, llevado a cabo por ella misma, con esas dos «sugerentes bombas» que están a la vista y a través del poco escondido «canalito» que las separa.