El líder holandés de Partido de la Libertad -Geert Wilders- ha reconocido su derrota en los comicios generales celebrados en Holanda, aunque se ha declarado «ganador de cuatro escaños más» que en las pasadas elecciones, en sus primeras palabras tras el anuncio de los sondeos a pie de urna que le atribuían 20 asientos.
«…Esto es una primavera patriótica. Yo soy un luchador y no un populista. Nuestra influencia es grande…», añadió el líder del Partido de la Libertad (PVV).
Por otro lado, agregó que prefiere «gobernar», pero señaló que está «dispuesto a hacer una fuerte oposición» al futuro Ejecutivo de los Países Bajos.
Rutte quedó en primer lugar con 33 escaños, muy lejos de los 76 que se necesitan para formar Gobierno. La tradicional fragmentación del Parlamento holandés ha hecho que su historia democrática esté caracterizada por los pactos, pero las alianzas postelectorales se antojan ahora complicadas. El liberal deberá entenderse con tres o cuatro partidos para tratar de formar un Ejecutivo que le mantenga en el poder otros cuatro años.
Con los primeros sondeos de la cita con las urnas en Holanda dando la victoria al actual primer ministro Mark Rutte, el candidato de la derecha alternativa Geert Wilders avisaba:
«…Gracias a mis votantes. Hemos ganado escaños. Rutte no se ha deshecho de mi», señalaba Wilders en un mensaje en cuenta oficial de la red social Twitter.
El Partido Laborista habría obtenido nueve escaños en lo que es un descalabro histórico, pues tenían 38, mientras que la Unión Cristiana y el Partido Animalista habrían logrado cinco, según los datos que recoge Europa Press. Otros dos partidos han logrado menos de cinco escaños.