En la imagen tomada este martes 4 de abril de 2017, se puede ver al representante de la formación política comunista Podemos en el comedor del Senado con su bandeja en la que hay dos botellines de cristal de Coca-Cola.
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Preguntados dirigentes del Partido Comunista -Podemos- por la fotografía han intentado echar balones fuera asegurando que la iniciativa registrada, tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado, para que se dejara de vender productos de la marca, buscaba denunciar que los refrescos que se venden en las dos instituciones son «únicamente» los de la marca Coca-Cola. —La chulería de Espinar ante Susana Griso desata la polémica en las redes sociales—
Y es que estos comunistas siempre hacen lo contrario de lo que dicen piden el reparto de la riqueza mientras las riqueza y los sueldos se las quedan ellos con los sueldazos que tienen los senados y diputados comunistas de Podemos.
Así son los senadores y diputados morados comunistas de Podemos. Además les encanta la técnica del enchufismo para colocar familiares y novias con puestazos de utilidad pública aunque de poca utilidad sirven si hacen lo contrario de lo que dicen. Principios vendo que para mí no tengo.
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Con el lema «…si Madrid no fabrica, Madrid no consume…», desde la organización de extrema izquierda -Unidos Podemos- pidieron que se dejara de vender productos de la marca «en solidaridad», decían, con los trabajadores de dicha identidad. —Senador de Podemos: “Hola, soy Ramón, el tertuliano más guapo de la televisión”—
Iniciativa que también llevaron al Congreso de los Diputados. El grupo parlamentario comunista de Pablo Iglesias dirigió un escrito a la Mesa de la Cámara Baja para pedir formalmente que no se vendan productos de Coca-Cola en toda la institución hasta que cumpla «la sentencia declaró nulo su Expediente de Regulación de Empleo de (ERE) de 2014».
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Pedían a la Mesa «que inste a Eurest, empresa adjudicataria del servicio de restauración Congreso de los Diputados, a que no sirva ningún producto comercializado por la empresa Coca-Cola Iberian Partners hasta que ésta no cumpla, tal como le mandatan tanto la Audiencia Nacional como el Tribunal Supremo, las sentencias que declaran nulo el ERE presentado en enero de 2014 y que supuso el despido de 1800 personas».
