Dentro del partido se ha asumido que el actual Secretario General Pedro Sánchez hará una ejecutiva a su medida en el congreso federal del próximo 6 de junio de 2017 y que, por tanto, su liderazgo quedará blindado hasta las próximas elecciones. Por ese motivo, la contestación interna contra el secretario general quedará paralizada hasta esa cita con las urnas.
ECD / Esa actitud, sin embargo, no quiere decir que la vieja guardia del partido, o aquellos dirigentes regionales y locales que se posicionaron en contra de Sánchez, hayan descartado “recuperar el PSOE”. De hecho, aseguran las fuentes consultadas, su objetivo ahora es forjar una nueva alternativa fuerte al madrileño para derrocarle en dos años.
En ese sentido, las fuentes consultadas comparan la situación de Pedro Sánchez con la del francés Hamon que, tras ganar las primarias de su formación, cayó con estrépito en las presidenciales y ha anunciado que creará un nuevo movimiento político al margen del Partido Socialista. Una trayectoria que podría seguir el secretario general electo.
Eduardo Madina, el elegido
Con ese escenario en mente, dirigentes socialistas ya están empezando a mover, a nivel interno, el nombre de Eduardo Madina como el de la persona idónea para hacerse con las riendas del partido una vez que Sánchez se vaya.
El diputado vasco ya estuvo cerca de imponerse a Sánchez en las primarias de 2014, a pesar de tener al aparato en contra, y ahora ha sabido marcar distancias a tiempo con Susana Díaz para no “quemarse” tras la derrota de la andaluza, a la que apoyó abiertamente.
En este sentido, las fuentes consultadas afirman que Díaz, tras la contundente derrota del pasado día 21, tiene “cerradas definitivamente” las puertas de la política nacional, mientras que Madina, sin embargo, mantiene intactas sus opciones: “Es joven, tiene experiencia, y tiene mayor capacidad de movilizar a la militancia. Además, cuenta con el respaldo de una amplia mayoría del partido”.
Le apoyan barones regionales y los jóvenes
Esa “amplia mayoría” de apoyos orgánicos del partido se encuentra ubicada en importantes direcciones regionales y también en nuevos valores del PSOE, llamados a ascender a nivel interno en los próximos 5 años.
En el primer grupo destacan importantes barones regionales, que ya miran a Madina como el futuro líder del PSOE. Entre ellos están, por ejemplo, Guillermo Fernández Vara y Javier Fernández, que ya optaron por el vasco en las primarias de 2014 y que, en los últimos tres años, le han seguido animando a mantenerse en la primera línea política.
Junto a ellos, darían respaldo a Madina frente a Sánchez otros dirigentes regionales que hace tres años optaron por el madrileño y se han arrepentido, como Emiliano García-Page, Javier Lambán y Ximo Puig. A todos ellos habría que sumar, aseguran las fuentes consultadas, a una Susana Díaz que deberá asumir que “su tren ya pasó”.
El apoyo de esos barones regionales puede no ser suficiente dentro de dos años, ya que algunos de ellos, como Fernández, Page y Lambán, pueden no estar ya al frente de sus federaciones. Sin embargo, hay una “segunda generación” de dirigentes locales y territoriales, jóvenes y con proyección, que también respaldaría a Madina.
En ese grupo, aparecen los nombres de los madrileños Juan Segovia y Juan Lobato; del aragonés Ignacio Urquizu; y del asturiano Nino Torre, entre otros. Todos ellos apoyaron a Díaz en las últimas primarias y son muy próximos a un Eduardo Madina que encontraría en ellos el apoyo de los líderes del futuro del PSOE.
La vieja guardia, también con él
Además del respaldo “del PSOE de hoy y de mañana”, las fuentes consultadas destacan que Eduardo Madina lograría, como Díaz, aunar a toda la vieja guardia del partido en torno a su candidatura.
Así, referentes del partido como Felipe González, Alfredo Pérez Rubalcaba y José Luis Rodríguez Zapatero ya le han transmitido, en los últimos meses, que él está llamado a liderar el PSOE a corto plazo.
Un liderazgo que podía llegar en apenas dos años si Pedro Sánchez no logra desalojar al Partido Popular de La Moncloa en 2019.
El plan es “esconderlo” y después “impulsarlo”
Hasta entonces, no obstante, “el plan es esperar y después impulsarlo”, explican dirigentes afines a Madina. Estas fuentes recuerdan el “desgaste” padecido por Susana Díaz desde el Comité Federal del 1 de octubre y de todos los barones regionales que la apoyaron. Y, por ese motivo, ahora obrarán de forma diferente.
El objetivo, añaden, es que Madina quede, durante este tiempo, “escondido” y al margen del PSOE de Sánchez. De esa forma, tampoco habrá debates sobre su futuro liderazgo y ni él, ni los que le apoyan, tendrán que enfrentarse con el secretario general hasta el momento de presentarse como alternativa.
El propio Madina, consciente de que ahora no es el momento de plantar cara al ganador de las primarias, ha optado alejarse del foco mediático, renunciando incluso a participar en la tertulia política de la SER. Un paso atrás que “se da para tomar carrerilla”, avisan los afines al diputado vasco.
