Por Carlos Cervera López para elmunicipio.es
El mal ya se estaba gestando, pero desde hace mucho tiempo. Nosotros lo avisábamos en multitud de ocasiones, en cientos de manifiestos y marchas por las calles de España. Nuestra nación corre peligro de ser pasto del separatismo. Estos días lo hemos estado viendo en el caso de Cataluña. El Partido Popular, si retrocedemos en el tiempo, ya podíamos ver como pactaban con el molt honorable Jordi Pujol. Y es que con tal de llegar al poder, la derecha, tan patriota de boquilla. Es capaz de pactar hasta con los más miserables de la clase política, ya se sabe que ninguna puta quiere se sola, como dice el dicho. A día de hoy, el Partido Popular. Otra vez. Ha vuelto a mostrar su ineptitud ante lo que está pasando en Cataluña. Han reaccionado tarde y a medias.
Las calles se han llenado de gente que con ánimo de querer llevar la violencia a su nivel mas extremos, se han dedicado a insultar, agredir y en ocasiones, acorralar a los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado. En un escenario de violencia extrema y donde los argumentos de sus ejecutores se han basado y siguen con las mismas, con que el Franquismo sigue vivo y que el estado Español es represivo, con estas, anchas son las ramblas para llevar la anarquía en su grado más extremo. Por otra parte y esto personalmente, nos llena de alegría. Han salido a las calles, grupos de personas llevando banderas de España y recordando a esos venenosos violentos, que Cataluña es España. Sabiendo que para la prensa del sistema, nosotros somos los “ultras”. Por decir la verdad, para nosotros es algo que nos hace sonreír, ya que sabemos que para los medios de comunicación, somos y seremos siempre los malos. Ya estamos acostumbrados a ello. Y por muchos años.
La fiesta de las sonrisas y la democracia que tanto pregonaban los cachorros del nacionalismo, se ha quitado la careta y ha mostrado su verdadero rostro, algo que incluso a despertado a aquellos viejos sindicalistas y gente de izquierdas, que ha realizado hace unos días, un mitin, denunciando lo que está ocurriendo. Profesores de universidad, denunciando la situación. Trabajadores de todas partes de España, amas de casa, jóvenes estudiantes. Todos los que sabemos que el juego nacionalista ha ido demasiado lejos. Adoctrinando a niños en los centros escolares, ahí hemos tocado fondo, cuando se pretende enseñar odio a una criatura, eso para mi es una muestra de la bajeza moral de toda aquella clase política que está enquistada en Cataluña. Seguimos esperando que el gobierno del Partido Popular, haga algo, pero después de todo lo que hemos visto. Toca empezar de nuevo. Bastante daño se ha hecho. Recuperemos Cataluña. Esa bella dama mediterránea que está siendo maltratada por aquellos que quieren enfrentarla a todas esas grandes regiones que forman nuestra madre llamada España.
El PP no va a hacer nada, parece mentira que todavía haya alguien que confíe en Rajoy, sería más facil que resucitara el pobre Blas Piñar