Un Juzgado de Cataluña ha abierto una investigación por un posible delito de incitación al odio en los centros educativos.
Los hechos han ocurrido en un colegio de la ciudad de Lérida, donde un grupo de jóvenes adolescentes se han metido con un niño pequeño.
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El motivo era que la madre del niño es miembro del cuerpo de la Guardia Civil, y en ese colegio los niños llevan semanas escuchando que los Guardia Civiles son malos para la población porque pegan a los catalanes. Un discurso que se ha generalizado entre los más separatistas en Cataluña para manipular a los niños cuando en ningún momento existieron cargas policiales.
El relato de la denuncia señala que:—Una niña de 13 años apuñala cinco veces a un compañero de clase—
“…Un alumno del centro habría sufrido humillaciones, insultos e incluso agresiones al ser su madre miembro de la Guardia Civil, y ser este hecho conocido por el resto de alumnos y profesores…”.
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Es por este motivo que el Juez ha creído oportuno que se inicien las diligencias previas para que el caso no quede aislado y poder dar con otros muchos casos similares que se puedan estar produciendo en los colegios de Cataluña.
