Iglesias culpa al PP de la crisis sanitaria y llama golpista a VOX
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, desembarcaba este jueves en la Comisión para la Reconstrucción creada en el Congreso de los Diputados tras la crisis de la covid-19 y lo hacía para instar al PP a una «rectificación» y para acusarle de los problemas del sistema sanitario. Además, provocaba un incidente con el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, tras acusar a este partido de querer dar un golpe de Estado pero no «atreverse a ello», después de lo cuál Espinosa abandonaba la sala visiblemente indignado.
LD / Tras asegurar que es esa comisión parlamentaria el ámbito adecuado para «poner sobre la mesa determinadas lecciones que nos deja esta emergencia y que creo que todo el mundo tiene en la cabeza» Iglesias se dirigía directamente a los populares: «Me quiero dirigir en este punto especialmente a sus señorías del Partido Popular. Señorías, creo que hoy hay determinadas cosas que son un consenso en nuestro país. Hoy todo el mundo tiene claro que los recortes de más de 7.000 millones de euros en la Sanidad Pública, las privatizaciones y la precarización de las condiciones de trabajo de sus profesionales que ustedes perpetraron, fueron decisiones absolutamente equivocadas que nos han debilitado como país para enfrentarnos a una situación como esta. Todo el mundo, también sus propios votantes, tiene claro que nunca más se pueden repetir los ataques a la sanidad pública. Creo, señoría, se lo digo con el ánimo más constructivo, que ustedes tienen la oportunidad en esta Comisión de reconocer que se equivocaron» concluía.
Tras esta andana inicial, en forma de mano tendida, hacia el primer partido de la oposición, el vicepresidente desglosaba la agenda ideológica de Podemos con la intención de que los populares se sumen a ella. Y lo hacía poniendo particular énfasis en un discurso proteccionista en materia económica, ya que a su juicio «todo el mundo, vote al partido que vote, tiene claro que nunca más puede volver a suceder que España no tenga la capacidad de proveer a nuestro sistema sanitario de materiales básicos, como respiradores o equipos de protección individual»; y también, muy singularmente, en el llamado impuesto a las «grandes fortunas».
De nuevo partiendo de la premisa de que todo el mundo está de acuerdo independientemente de a qué partido vote, Iglesias afirmaba que «reconstruir la justicia fiscal es también una cuestión de patriotismo. En 2019, España recaudó un 7,4% del PIB menos que la media de la zona euro. A todos nosotros nos pagan los ciudadanos para defender sus intereses y para defender España, y creo, por tanto, que todos tenemos la obligación de trabajar para corregir esa desventaja en términos de justicia fiscal que tiene nuestra patria respecto a los países de nuestro entorno».
La acusación a Vox
El vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, ejercía su turno de réplica en la Comisión para la Reconstrucción del Congreso cuando, contestando al diputado del PP Mario Garcés, defendía que él dialogaría siempre con el ex presidente catalán fugado de la Justicia, Carles Puigdemont, como líder de una formación a la que, decía, «votan muchos españoles».
A continuación decía que «se puede imaginar la opinión que tengo yo del señor Espinosa de los Monteros o del señor Abascal, pero les han votado muchos ciudadanos españoles, y aunque a veces parezca que más quieren dar un Golpe de Estado que proteger la democracia española, estoy dispuesto a dialogar con cualquiera» momento en el que Iván Espinosa de los Monteros, presente en la sala Ernest Lluch, interrumpía el discurso para pedir al presidente de la comisión, el socialista Patxi López, que tomase «cartas en el asunto» ante una «manifestación absolutamente intolerable, que falta a la verdad y que es tremendamente ofensiva para nuestro grupo parlamentario y los cuatro millones de personas que le han votado».
Patxi López, visiblemente enfadado y tuteando al portavoz de la tercera fuerza de la Cámara Baja, excusaba a Iglesias: «Ha dicho que parece que, no que vayan a dar un Golpe de Estado. Es que no tiene la misma categoría, claro, y aquí alguno tiene la piel muy fina… Estoy hablando yo y no tiene la palabra». Finalmente, e instado por Espinosa de los Monteros, le preguntaba a Iglesias «si quiere retirar» su formación, momento en el que el vicepresidente, sonriendo visiblemente, subía la apuesta: «Voy a ser todavía más preciso: yo creo, señor Espinosa de los Monteros, que a ustedes les gustaría dar un golpe de Estado, pero que no se atreven, porque para eso, además de desearlo y de pedirlo, hay que atreverse».
En ese momento el portavoz de Vox abandonaba visiblemente airado la sala asegurando que esa comisión es «una vergüenza» y que no lo iba a consentir. Iglesias, ante la pasividad del presidente López, le preguntaba irónicamente que en «qué se iba a traducir» esa afirmación, «por saberlo» apostillaba, mientras López les pedía no entrar «en diálogos». Con la misma sorna, Iglesias añadía: «Cierre al salir», sin que el presidente de la comisión hiciese nada más.