Inés Arrimadas, como era previsible, volverá a ser la candidata de Ciudadanos en las elecciones autonómicas de Cataluña, que se celebrarían en 2019 de agotarse la legislatura, pero que muy probablemente se adelantarán, incluso este mismo año.
LD / Ante esta eventualidad, el partido naranja decidió convocar ya las primarias internas, que merced a los nuevos estatutos ya no se realizan para los cinco primeros puestos de cada lista, sino para el cabeza de cartel.
Como ocurriera en las primarias por las que a principios de año Albert Rivera y su renovada Ejecutiva fueron elegidos, la votación interna ha tenido tres rasgos característicos: la baja participación, un 35%, la falta de competencia, pues los rivales de Arrimadas eran meros afiliados de base, alguno con apenas un año de militancia y, por último, el voto telemático, una modalidad discutida en algunos sectores del partido y que, por ejemplo, no ha utilizado el PSOE en sus recientes primarias.
Arrimadas ha obtenido 792 votos, Daniel Granados Vera 15, Sergio Querol Beltrán 14 y Jordi González Barba 4 apoyos.
Arrimadas, nacida en 1981 en Jerez de la Frontera, se afilió a Ciudadanos en 2011, cuando trabajaba en una empresa de consultoría. Es licenciada en Derecho y está casada con Xavier Cima, antiguo diputado autonómico de Convergencia Democrática de Catalunya.
Su carrera en el partido naranja es la más fulgurante de la historia de la formación. En 2012 ya era diputada tras haber liderado a los jóvenes del partido y en 2014 accedió a la portavocía adjunta del grupo que entonces lideraba Rivera tras la dimisión de Jordi Cañas, entonces portavoz, a quien sustituyó Carina Mejías.
Se consagró finalmente en 2015, cuando primero tomó el relevo en la portavocía de Mejías, quien abandonó el Parlamento catalán para liderar la candidatura a las municipales de Barcelona, y luego cuando fue designada candidata a las elecciones de septiembre de aquel año. Una cita electoral en la que logró el hito de convertirse, con veinticinco diputados, en el primer partido de la oposición apenas nueve años después de haber obtenido representación por primera vez.
De cara a los próximos comicios en Cataluña, la estrategia cocinada en el cuartel general de Ciudadanos, y que ya ponen en práctica sus dirigentes en declaraciones públicas, es simple y directa: los catalanes tendrán que elegir, afirman, en hacer presidente al líder de ERC, Oriol Junqueras, o a Arrimadas, quien aspira a encabezar un Gobierno de concentración constitucionalista con el respaldo de PSC, PP e incluso Podemos.