Ada Colau hace aflorar sus delirios de emperatriz. Quiere para su investidura como alcaldesa una suerte de concilio ecuménico, con la presencia de líderes religiosos de distintas confesiones. En otras palabras, la líder de la marca blanca de Podemos en Barcelona pide que Martínez Sistach, cardenal arzobispo de la ciudad condal, esté acompañado en su toma de posesión por un imán y un rabino, según ha informado el diario economico de los negocios.com y otros medios de comuniciación.
La fobia a las tradiciones de Ada Colau se hace cada vez más visible. A la vez que quiere introducir a un rabino y un imán en su ceremonia de investidura, pide reducir la presencia de la Iglesia Católica y el Ejército español en los actos populares. La revolución está a unas horas de tomar el control de Barcelona.
Ada Colau no solo invita a un imán y a un rabino a su ceremonia de investidura, sino que aprovecha para convidar a representantes de empresas e instituciones. Ahora bien, la zona VIP la reservará para los miembros de la Plataforma Antihipotecas, de la Federación de Vecinos y de demás asociaciones que hayan participado en sus algaradas callejeras, los cuales ocuparán zonas preferentes.
El ecumenismo progre de Ada Colau no se reduce a incluir un imán y un rabino en su «bautismo» como alcaldesa. Esto es solo el principio. El siguiente paso será darle poder y altavoz a una religiosa comunista. La monja Teresa Forcades abandonará el convento de las las benedictinas de Sant Benet de Montserrat, con permiso del Vaticano y del obispo de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona) para presentarse a las elecciones autonómicas del 27-S. La revolucionaria con hábito encabezará una lista propia o bien se adherirá a las CUP.
Esta individua, la Colau, se va a enterar el día que los imanes la pongan el burka.
Esperemos que el tal cardenal. Martínez Sistach, se niegue a asistir a tal ceremonia con la que se romperían tradiciones centenarias de Cataluña y España. A otro, al que un día tales imanes le quitarán de un papirotazo el capelo cardenalicio los tales imanes. Roma nunca pagó a traidores.
Se dice que la plaza de toros, la Monumental de Barcelona, quieren comprarla los mahometanos para hacer una mezquita. ¿Qué va a pasar cuando las oraciones del muecín se oigan en el Tibidabo, palabra que tiene que ver con Cristo: «Te daré».
Sera: Un iman y un rabo.
Qué tentación para hacer un comentario a eso del rabo, ya que antes se ha hablado de la Monumental de Barcelona, pero me lo guardaré porque me saldría procaz. Claro que son tan progres estas alcaldables que a lo mejor le gustaba.
Que podría ser un juego de palabras entre el rabo y se lacolau.