- Es decir, 12 rupturas por hora y 290 al día frente a 434 matrimonios diarios.
- Siete de cada diez matrimonios (0,67%) que se celebran al año acaba en ruptura, superando la media de la UE (0,46%).
- De las 105.893 rupturas anuales, 100.746 son divorcios, el doble que en 2004 por la ley de divorcio exprés.
- Cada vez se casa menos gente y más tarde, el 67,7% lo hace sólo por lo civil y el 16,3% son internacionales.
- Aumentan los hijos extramatrimoniales (más de 173.000 niños; un 40,8% del total) y las parejas de hecho (1,6 millones; 14%).
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No es ningún secreto que el matrimonio en España presenta un delicado estado de salud. Pero ahora este drama se certifica con las cifras del Informe sobre ‘Nupcialidad y Ruptura en España 2015’, publicado por el Instituto de Política Familiar (IPF). Entre otros aspectos, destaca que cada cinco minutos se rompe un matrimonio en nuestro país y ya se acumulan casi tres millones desde 1981.
El presidente del IPF, Eduardo Hertfelder, ha señalado que la primera conclusión es que se está produciendo un “desmoronamiento del número de matrimonios”, al mismo tiempo que hay un aumento vertiginoso de las rupturas familiares. En concreto, se dan 12 rupturas cada hora y 290 al día frente a 434 matrimonios diarios.
En nuestro país, siete de cada diez matrimonios (0,67%) que se celebran al año acaba en ruptura. De esta manera, tenemos una de las mayores tasas de ruptura/nupcialidad de la Unión Europea (UE), junto a Portugal, Dinamarca y Luxemburgo, y superamos la media comunitaria (0,46%). Pero el drama es mayor, si se tiene en cuanta que en seis de cada diez rupturas había hijos: hay más de 97.650 afectados cada año, de los cuales 84.900 son menores de edad.
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Conviene subrayar que del total de las 105.893 rupturas anuales, la inmensa mayoría son divorcios. Concretamente, 100.746 (95,1%), el doble que en 2004 por la entrada de la ley de divorcio exprés. En cuanto a las separaciones, sólo suponen ya el 4,8% de las rupturas (5.034) y las nulidades, un 0,1% (113). El IPF menciona que “detrás de cada persona que se divorcia hay un conflicto por resolver y un drama familiar, por lo que el divorcio no arregla ningún problema sino que agrava los que trata de resolver”.
Pero el matrimonio no sólo tiene un delicado estado de salud por la gran cantidad de rupturas, sino porque cada vez se casa menos gente. El IPF destaca que en el 2000 hubo 216.451 matrimonios y en 2014, sólo 158.425, es decir, un 27% menos. Pero advierte que la caída de la nupcialidad habría sido mayor sin la inyección de matrimonios internacionales: se registraron 25.840 y ya representan uno de cada seis (16,3%).
Los pocos que se casan lo hacen cada vez más tarde: los españoles a los 35,3 años de media. Una edad que ha ido aumentando desde 2004: así, los hombres han pasado de casarse a los 31,2, a los 36,9 años; y las mujeres, de los 29,1 años, a los 34. Canarias, Baleares, Cataluña y Madrid son las comunidades autónomas donde más tarde se casan las parejas. Además, la mayoría de los matrimonios (67,6%) se realizan exclusivamente por lo civil. En concreto, representaron 107.075 matrimonios del total (158.425) y Cataluña es la región con el mayor número.
También se ha producido un crecimiento espectacular de la natalidad extramatrimonial: más de 173.000 niños (40,8%) nacen fuera del matrimonio. Así como un aumento de las parejas de hecho, que se han triplicado en los últimos 13 años y ya alcanzan la cifra de 1,6 millones (14% del total). Además, hay más familias monoparentales (1,7 millones), sobre todo, viudos/as (más de 700.000).
Ante este dramático panorama, el IPF propone varias medidas. Entre ellas, políticas activas públicas y preventivas que ayuden a los matrimonios a superar sus crisis y promuevan una cultura de reconciliación. El organismo que preside Hertfelder solicita protección jurídica para la familia, así como la implantación de una ley de Prevención y Mediación Familiar, la derogación de la ley del divorcio exprés y la reforma de la ley de protección a las familias numerosas.
Pero el IPF no se limita al marco político y legal, también propone la creación de una Mesa de expertos y campañas de sensibilización social y conciliación sobre la importancia del matrimonio y de la familia en los medios. Medidas que deberían tener en cuenta los partidos de cara al 20-D, pues la familia es el pilar de la sociedad y “es y será la carta magna de la Iglesia”, en palabras del papa Francisco.
Información ofrecida por el diario Hispanidad.
