En Moncloa y en Génova reconocen que Pedro Sánchez fue «a matar» políticamente a su candidato. «Sólo tenía un objetivo, matar y así ganar o poder optar a ganar», según el entorno de Mariano Rajoy. Aunque, según todas las fuentes consultadas, no lo consiguió: «Al no matar, acabó perdiendo», zanjaron al más alto nivel. Sánchez estuvo «marrullero, faltón y a la desesperada», resumieron en el Partido Popular.
LD / Para el Partido Popular, Mariano Rajoy acabó salvando el debate porque su contrincante se pasó de frenada. De hecho, en el primer bloque se vivieron momentos de angustia en Génova porque el presidente no acababa de rematar su relato económico ante las constantes interrupciones de Sánchez. Luego, llegó el barrizal político, y la dirección de campaña cree que el socialista «se suicidó» al querer parecerse a Pablo Iglesias.
«Rajoy, al defender su honorabilidad, resistió el ataque y Sánchez quedó insatisfecho y fracasó en su objetivo», según el primer análisis que le transmitieron a Rajoy, que en su aparición en Logroño apenas hizo mención al rifirrafe. La anécdota llegó en la frutería «Pedro» de la ciudad. «Éste es el Pedro bueno», ironizó el candidato ante los periodistas.
A falta de nuevos trackings -los sondeos de poca muestra que el PP elabora diariamente en campaña para analizar las tendencias electorales-, los asesores de Rajoy auguraron que el debate no moverá «muchos votos», pero que en la opinión pública calará la idea de «un macarra» frente a «un caballero». «Un Ruiz contra un señor de Pontevedra», remataron las fuentes consultadas en tono jocoso, en relación a la equivocación del propio Mariano Rajoy.
En su primer mitin, Rajoy no varió su estrategia electoral dando sensación de seguridad. Todo sigue en orden, transmitieron. Mientras, sus portavoces atizaron a Sánchez. María Dolores de Cospedal, por ejemplo, contrapuso la «dignidad» de su candidato» a la «soberbia y mentiras» del socialista. «No dijo nada bueno de su país ni ofreció ninguna propuesta para garantizar el futuro de España, no argumentó, no explicó ni razonó ninguna de las falsedades que decía porque no podía reconocer nada que le apartara de la línea argumental de ataque y que además se adornó con contradicciones toda la noche», en voz de la número dos del Partido Popular, protagonista en Bilbao.
Todo alto cargo que tomó la palabra lo hizo para arremeter con dureza contra Sánchez. «España no se merece un Pedro Sánchez maleducado y a la desesperada», afirmó el gallego Alberto Núñez Feijóo. «Es un boxeador que se agarra porque va tocado», según Cristóbal Montoro. Remataba Alfonso Alonso: «No se puede ser presidente si no se tienen modales».
Nada quisieron precisar sobre si el debate acabará dando más apoyos a Ciudadanos y Podemos, como así han opinado algunos líderes de opinión. Rajoy se subirá esta tarde a la caravana electoral del Partido Popular para mantener una conversación informal con los periodistas.