Una investigación en el Hospital Universitario de Tokyo en Shinjuku ha concluido que la causa del incendio que se produjo en un quirófano durante un parto fue un pedo que se tiró la madre de la criatura.
Ocurrió cuando la mujer llevaba varias horas dilatando para dar a luz a su pequeño y tenia que ser intervenida. Al parecer, el gas de la ventosidad tomó contacto con el láser utilizado para la operación, lo que provocó que se incendiara la sábana quirúrgica. La paciente resultó herida de gravedad, según han informado varios medios de comunicación y que se ha hecho viral en las principales redes sociales.
La única persona que pudo quedarse en el parto del pequeño tras la intervención fue el marido de la mujer –lo que tiene que aguantar los hombre en algunas ocasiones- para ver como su esposa daba a luz a su bebé. El hombre tuvo que utilizar una mascara anti gas para poder permanecer en el interior de la sala.
Tanto el director del Hospital como el servicio de emergencias activaron la alarma de incendios para poder resolver el problema que fue resulto al poco tiempo por el personal de las instalaciones encargadas del mantenimiento.
Posteriormente se comprobó que en el quirófano no había material inflamable y que todos los utensilios funcionaban correctamente.
