En Navarra existe un componente vasco innegable. Y es estupendo que sea así. Y no es incompatible ni con lo navarro ni con lo español sino perfectamente complementario y hasta consustancial. Puesto que hay muchísimos navarros que lo viven y lo sienten así, salta la vista que quien encuentra una incompatibilidad es por motivos totalmente subjetivos. Es más, a menudo el nacionalista es un Ruiz o un Ramírez y el no nacionalista un Goicoechea o un Esparza.
Navarra Confidencial / El caso es que de reconocer que existe un componente vasco en Navarra, totalmente legítimo, quizá tengamos que empezar a insistir en no confundir la parte por el todo y que también es legítimo ser navarro sin tener ese componente.
La Navarra que no participa de ese componente vasco no tiene que pedir perdón por ello ni vivir acomplejada. Ya el Fuero fue redactado en romance en 1238. Hace siglos que Navarra es un territorio complejo y plural. Y por tanto no hay ningún navarro que necesite aprender euskera, tocar el chistu o poner nombres vascos a sus hijos para ser mejor navarro o un navarro completo. Existen navarros que hablan euskera y navarros que no, pero no existen navarros incompletos. Tan navarro es alguien que se llama Pedro como alguien que se llama Iraultza o Garikoitz. O Vladimir.
¿Y esto a qué viene?
Pues a que hace unos días se publicaba la relación de nombres y apellidos más frecuentes en Navarra y, oh sorpresa, cero apellidos vascos entre los más frecuentes. Pero no así entre los nombres.
Naturalmente cada uno le puede poner a su hijo el nombre que quiera, faltaría más, pero teniendo claro que Unai García no es ni más ni mejor navarro que Carlos García. Y que si Unai García o Laura Pérez un día reivindican la defensa de su cultura, sus orígenes, sus ancestros y su lengua, a lo mejor eso no tiene nada que ver con el modelo D o con ser atendidos en Caparroso por una enfermera euskaldún.
Sea o no todo lo anterior una paranoia, a la vista de los nombres y los apellidos más frecuentes una parte de nosotros nos dice que a lo mejor sí que existe en cambio una cierta esquizofrenia. Aunque otra parte de nosotros nos dice que no.