Os presentamos al teniente Alexander Prokhorenko, de los «Spetsnatz» rusos, si lo sabemos, no es guapo, ni llama la atención, jamás le invitarían a Gran Hermano VIP, ni saldría en la TV basura española, y su último trabajo era jodido, pues debía señalizar con láser objetivos para los bombarderos rusos, cuando fue descubierto y rodeado por los islamistas en Siria.
No podía escapar, y decidió indicar sus coordenadas a su aviación para que destruyeran el lugar en el que estaba. Con él cayeron decenas de ratas del ISIS. Tenía tan solo 25 años de edad, y esperaba un hijo…
Gracias a gente como él, Palmira, un lugar Patrimonio de la Humanidad, ha sido salvado para la Civilización, así que en comparación, si queréis os damos nuestra opinión sobre los de Podemos o sobre Manuela Carmena y sus ideas acerca de la «negociación» con los islamistas.
Ahora sólo esperamos qué en los próximos años no necesitemos muchos como él.