Colabora con el periódico digital El Municipio con un donativo para seguir informando con un periodismo combativo en libertad
Pincha en el boton Donar. Muchas gracias por tu ayuda y colaboración.
Colabora con el periódico digital El Municipio con un donativo para seguir informando con un periodismo combativo en libertad
Pincha en el boton Donar. Muchas gracias por tu ayuda y colaboración.
El Gobierno recula y castiga con menos subsidio por ERTE a los despedidos con hijos
«No vamos a dejar a nadie atrás». Esta fue una de las aseveraciones más sonoras que Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, subrayó en la comparecencia en la que presentó el plan económico para luchar contra las consecuencias del coronavirus. Sin embargo, según confirman varias empresas que ya han presentado expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), la Administración ha decidido discriminar a los trabajadores que tengan familia, pagándoles un 24% menos de lo que les correspondería según la tabla salarial oficial.
El Confidencial / Según estas compañías, el Sistema Público de Empleo Estatal (SEPE) les ha comunicado que la prestación máxima de desempleo que van a pagar a todos los afectados, tengan o no descendientes a su cargo, es la mínima sin hijos. Es decir, 1.098 euros. Sin embargo, según la tabla oficial del Ministerio de Trabajo, las personas con vástagos deberían percibir un máximo de 1.411 euros para poder atender los gastos adicionales de mantener a una familia.
La decisión es un bombazo para el bolsillo de los ciudadanos afectados por los recortes temporales de empleo y para las empresas, algunas de las cuales están haciendo números para compensar a los que va a discriminar el Gobierno. Para que sea un sacrificio proporcional, las compañías están analizando abonar la diferencia de esos 311 euros por cabeza, lo que les supondrá un esfuerzo adicional en costes laborales en un momento en el que, en muchos casos, están ingresando cero.
Lo curioso es que, cuando las empresas formalizaron sus ERTE la semana pasada, Trabajo les reclamó las tablas del número de afectados, con los hijos a su cargo y la edad de los descendientes. Pero, ahora, en el momento de su autorización, el Estado les ha pedido únicamente la cifra de despedidos temporalmente, con indiferencia de si tienen o no familia. La justificación del Gobierno es que se trata de una medida excepcional y que, al no consumir paro, se va a pagar el mínimo exigible.
Para calcular lo que una persona incluida en un ERTE va a cobrar, se toma como referencia la cotización media que haya tenido el trabajador en los 180 días inmediatamente anteriores al expediente. El baremo o base reguladora es el promedio durante dicho periodo de las bases de cotización por contingencias profesionales, excluidas las pagas extraordinarias. De este modo, la cuantía de la prestación equivale al 70% de la base reguladora durante los primeros 180 días de percibo de la prestación, y al 50% de la base reguladora a partir del día 181 hasta la extinción de la prestación.
No obstante, hay establecidos unos mínimos y unos máximos, que dependen de las cargas familiares del trabajador afectado. Así, los beneficiarios que no tengan cargas familiares, al menos cobrarán 501,8 euros al mes, que se elevan hasta los 671,4 euros para quienes tengan hijos. Según la tabla oficial, el máximo establecido también varía y oscila desde los 1.098,09 euros para quienes no tengan descendencia y los 1.254,96 euros para los que tengan un hijo hasta los 1.411,83 euros para los que tengan dos o más vástagos.
Sánchez explicó cuando anunció sus medidas económicas que se trataba de «un plan de choque sin precedentes». «El Estado tiene recursos poderosos», enfatizó cuando concretó que la cifra que iba a poner para superar esta crisis que definió como temporal sería de hasta 200.000 millones. El presidente insistió en que «todos van a tener la protección del Gobierno. No vamos a dejar a nadie atrás. El Estado va a asumir el ‘shock’ que representa el frenazo de la economía española. Y después tendremos que hacer frente a la reconstrucción”.
Sin embargo, el cambio de criterio de Trabajo sobre los ERTE, que afectan ya a más de un millón de personas, deja a muchas familias con recursos ínfimos para salir adelante. Entre las empresas que se han acogido a esta medida con la creencia de que el Estado trataría a todos de forma proporcional, se encuentran El Corte Inglés, Mango, Tous, Pepe Jeans, H&M, Decathlon, Cortefiel, Iberostar, Port Aventura, Globalia, Iberia, Barceló, NH Hoteles, Seat, Ford, Volkswagen, Nissan, Renault, Antolin, Gestamp, Mediapro, Pikolín e Ikea.