Los actos violentos son una realidad diaria, algo que no parece tener fin y que no discrimina a nadie. La última víctima ha resultado ser el padre Lino Hernando, sacerdote de la Parroquia Nuestra Señora de Covadonga situada en la ciudad de Madrid. —Sacerdote anciano termina en coma tras brutal agresión en España—
Mientras que el párroco estaba oficiando la misa de tarde, un individuo que se encontraba en el templo se levantó y comenzó a insultarle en plena misa gritándole y gesticulando con los brazos, según ha informado el diario Actuall.
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De repente, esta persona se acercó al altar y lanzó las formas consagradas al suelo. A continuación, la emprendió a puñetazos y patadas contra el sacerdote, delante de todos los que se encontraban celebrando la eucaristía. —Carta de un sacerdote a la asaltante de capillas Rita Maestre—
El sacerdote aguantó los golpes hasta que la policía llegó a la iglesia, avisada por los feligreses que se encontraban presentes y se llevó al individuo detenido. El párroco en un gran acto de valentía decidió continuar con la misa y una vez terminada, fue cuando acudió al hospital.
El Padre Hernando ha confirmado a diferentes medios de comunicación digitales que se encuentra en buen estado, “aunque dolorido por el golpe”. Explica que “el desconocido se levantó y me tiró al suelo. Me dí un golpe contra el suelo de mármol pero cuando se lo llevaron decidí continuar porque sólo estaba un poco mareado”.
Cree que el ataque no fue dirigido hacia su persona en concreto por ser religioso, sino que “esta persona podría estar desequilibrada y me tocó a mí como le podría haber tocado a cualquiera. Gracias a Dios que no ocurrió nada más grave“, ha señalado ante los medios de comunicación el sacerdote. —El vídeo más humillante para el padre Jacques antes de morir degollado por los islamistas—
