1) Mariscos
Pedir marisco puede resultar tentador. Por un precio poco elevado podemos disfrutar de un plato bien rico, y salimos de la clásica ensalada mixta o la pasta con tomate. Pero es algo que no debemos hacer, a no ser que estemos en la costa. «Personalmente, evitaría pedir marisco si estoy a más de 30 km de la playa», dijo un usuario. «Yo también evitaría los mariscos a menos que esté en un lugar que sea especialista o en ello o si sé que se han pescado peces frescos», añadió otro. «Nadie pediría marisco en el desierto, no seas estúpido», remata un internauta, chef desde hace doce años.
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Es un punto importante. Si el pescado no está en buenas condiciones, puede entrañar serios peligros para la salud. Si el marisco es fresco (no está congelado), debería limitarse única y exclusivamente a los locales situados cerca de la costa. Esta norma se extiende a todos los platos que lleven marisco, pues recuerda que un sola pieza podría arruirnar el resto y, por lo tanto, acabar siendo perjudicial para ti.
2) Aquello que no sea especialidad de la casa
No tiene mucho sentido ir a un restaurante chino y acabar pidiendo hamburguesa con patatas. Ni tampoco lo tiene ir a uno americano y pedir arroz tres delicias. Es raro y bastante poco inteligente. «Si vas a un asador, pide carne. Si vas a un italiano, pide pasta. Si comes en un japonés, pide sushi», detalla un usuario. Y no puede ser más claro. «Por norma general, si el restaurante tiene algo en su menú que no se ajusta a sus especialidades, no lo pidas», añade otro.
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3) Sopa
Además de porque engorda mucho, como ya te contamos en este artículo, en el hilo de ‘Reddit’, numerosos camareros aseguran que la sopa se suele dejar en un recipiente gigante durante toda la noche, para que nunca se enfríe, haciendo que se mantenga tibia durante horas. «Es el recurso de muchos restaurantes para cocinar con agua las sobras», detallan.
4) El especial
«Depende del restaurante, pero yo por norma general nunca pediría los especiales en un menú. Normalmente, se trata de alimentos que están a puntode echarse a perder o de caducar, por eso quieren gastarlos como sea», revela un internauta chef. Así pues, si alguna vez ves un menú que de pronto valga menos, o un plato que sea extramadamente barato y destacado, es mejor que no lo elijas. Al final te saldrá caro. «Por regla general, el especial es cualquier comida vieja de la que quieren deshacerse rápido», aseguran.
5) Hielo
Debes evitar consumir hielo en los restaurantes o bares a toda costa. Y mucho más si te lo ponen con el menú. Pide siempre la bebida fría, pero sin agua congelada en cubitos. ¿La razón? «Las máquinas raramente se limpian, y con frecuencia acumulan moho».
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Un camarero advierte de otro problema: que los hielos han sido tocados por todo quisqui: «Trabajo en un restaurante y estoy harto de quejarme porque mis compañeros cogen pedazos de hielo con las manos al desnudo. No quiero imaginar dónde más ocurre esto pero por si acaso yo siempre pido mis bebidas sin hielo». Otro usuario señala «la cantidad de bacterias» que acumulan las máquinas de hielo.
6) Pollo
Un forero, que lleva trabajando como camarero más de diez años, asegura que la pechuga de pollo es lo que pide la gente indecisa y que no le gusta lo de la carta, por eso los cocineros no se esfuerzan en hacerlas bien. Lo mismo ocurre si pides pollo a la parrilla. «En cada restaurante en el que lo he pedido me ha decepcionado», añade otro.
7) Pan de mesa
Esto te dejará helado. Nunca jamás debes comer del pan que te ponen con el menú. ¿Sabes por qué? «Lo van reponiendo de unos a otros». Es decir, si un comensal no consume su pan, se lo ponen a otro cliente. Te comerás el pan manoseado por tropecientas personas.
8) Pescado
Tampoco deberías pedir pescado si es fin de semana o lunes, ya que «no será fresco». El día perfecto para pedir este plato son los jueves, momento en el que los cocineros encargan su compra en el mercado. Asimismo, olvida encargar pescado en locales particularmente económicos ni a restaurantes orientales que vendan sushi demasiado barato.