Los propietarios de perros en España tendrán que contratar un seguro obligatorio de responsabilidad civil a partir del próximo 29 de septiembre de este año 2023. Es una de las obligaciones que establece la ley de Protección de los Derechos y Bienestar de los Animales del ministerio comunista de Ione Belarra. Además tienes que ver la nueva Ley Animal –A prisión por matar una paloma o una rata-.
Seguro obligatorio y curso de tenencia de perros
Además del curso de formación gratuito para la tenencia de perros. De este modo, los dueños de los perros tendrán que asumir un coste extra, ya que las multas por no contar con el seguro pueden ascender hasta los diez mil euros. Otra medida más recaudatoria para los señores comunistas y socialistas del Gobierno de Pedro Sánchez.
Hasta ahora, asegurar a una mascota era voluntario excepto para los perros potencialmente peligrosos (pit bull terrier, staffordshire bull terrier, american staffordshire terrier, rottweiler, dogo argentino, fila brasileiro, tosa inu, akita inu y mestizos con características físicas similares). Te interesa ver –Los perros viven menos que las personas-.
Madrid y Vascongadas solo tenían el seguro obligatorio: El seguro para perros de Ione Belarra
Madrid y las Vascongadas son las dos comunidades autónomas donde el seguro era obligatorio para todos los perros sin excepción. Por lo que, con la entrada en vigor de la ley de Bienestar Animal a finales del próximo mes de septiembre, esa obligación se extiende a todos los españoles que tengan como mascota un perro en su propiedad, es decir, sean dueños del animal en cuestión.
Los seguros para las mascotas en España
Los seguros para mascotas incluyen distintas coberturas legales y sanitarias, pero la ley indica que como mínimo hay que contratar un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros. Que suele ser el más básico y barato de los seguros.
Esta póliza de seguro debe mantenerse en vigor durante toda la vida del animal y las coberturas deben incluir a las personas responsables del animal «por un importe de cuantía suficiente para sufragar los posibles gastos derivados, que se establecerá reglamentariamente».
El seguro para perros de Ione Belarra para no ser multado con 10.000 euros: Seguro por lo daños que el perro puede producir a terceras personas
Este tipo de seguro cubre las lesiones corporales, daños materiales y cualquier tipo de perjuicio que un perro provoque a las personas, pero no las que ocasione al propio dueño, a su pareja, padres, hijos, nietos o cualquier persona que se encargue de su cuidado. Es decir, que, si un perro cruza la calle corriendo y en su camino se lleva por delante a un ciclista, el seguro cubriría el coste de reparar la bici y la asistencia sanitaria del ciclista, siempre y cuando no sea familia del propietario del perro.
¿Cuál es el precio del seguro obligatorio para los perros?
El precio de los seguros para los perros depende de cada compañía aseguradora y de las coberturas asociadas a la misma. Pero ¿Cuál es realmente el precio del seguro para los perros?
Los más básicos se pueden contratar desde los 24 euros al año con cobertura de hasta 200.000 euros con franquicia de 200 euros. Los más comunes rondan los 50 euros con coberturas de hasta 150.000 euros sin franquicia. También existen seguros más completos por unos 90 euros al año con cobertura de hasta 150.000 euros por daños a terceros, residencia canina gratis en caso de hospitalización del propietario y asistencia veterinaria por accidente de hasta 1.000 euros, según las fuentes consultadas.
¿Cuáles son las multas por no tener el seguro de perros?
La ley de Bienestar Animal de la comunista Ione Belarra se publicó en el BOE el pasado 29 del mes de marzo y da un plazo de seis meses para su entrada en vigor. Por lo tanto, esto quiere decir que cualquier propietario que a partir del 29 de septiembre no tenga asegurado a su perro puede enfrentarse a una sanción o multa que sería leve, salvo que el desarrollo reglamentario posterior diga lo contrario.
El seguro para perros de Ione Belarra para no ser multado con 10.000 euros
Se consideran infracciones leves todas aquellas conductas que «por acción u omisión» incumplan las obligaciones establecidas en la ley siempre y cuando no provoquen daños físicos en el animal ni alteraciones de su comportamiento. En este caso, el propietario podría recibir un simple apercibimiento o ser multado y sancionado con entre 500 euros a 10.000 euros.
