Las humillaciones de Feijóo a VOX
El masón de Alberto Núñez Feijóo lo tiene muy claro tras las elecciones generales y prefiere pactar con los socialistas de Pedro Sánchez -concretamente con la rama socialista encabezada por Emiliano García Page- antes de hacerlo con la formación política de Santiago Abascal.
Además tienes que ver toda la información sobre –Los planes secretos de Feijóo para pactar con el PSOE tras las elecciones generales-.
Las palabras del popular Alberto Núñez Feijóo
“VOX no es un buen socio, me siento más cercano a Page, si necesito 20 escaños voy a hablar con el PSOE». Es la frase del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, con la que han querido resumir en El Español -periodico del sistema liderado por Pedro J- la entrevista concedida por el político gallego para darse publicidad ante las elecciones generales del próximo domingo 23 de Julio.
Las críticas de Feijóo contra VOX para humillar a la formación de Abascal
“Vox provocaría unas tensiones innecesarias. Sus ideólogos me producen mucha intranquilidad. No me siento cómodo con ese partido”, ha comunicado Alberto Núñez Feijóo ante las preguntas de El Español, en una entrevista en la que ha vuelto a preguntarse si el PSOE va a facilitar su investidura” ¿El PSOE no va a facilitar la investidura si el Partido Popular tiene más votos que la izquierda? ¿Su objetivo es que VOX entre en el Gobierno?, se ha preguntado.
La coalición del bloque de la derecha
La intervención del Alberto Núñez Feijóo para intentar en todo momento separarse de VOX con el objetivo político de conseguir más votos es muy conocida. Pero todos saben que necesita los votos y escaños de VOX para que pueda formar Gobierno después de las elecciones. Un Gobierno en el que entraría VOX y que Santiago Abascal conseguiría entrar en dicho Gobierno para no traicionar sus votantes.
Las humillaciones de Feijóo a VOX
Las palabras de Feijóo contra VOX ha provocado que muchos votantes del Partido Popular se estén planteando el voto hacia la formación de Santiago Abascal. Además, el no estar en el debate electoral el próximo miércoles está provocando cabreo y enfado entre los popular más conservadores.