La manifestación en repulsa por los atentados del 17-A Barcelona y Cambrils tendrá una baja importante: el líder IU Alberto Garzón . Y no es por falta de compromiso ni por rechazo a la presencia monárquica. La razón de tal ausencia es que a esa hora de este sábado, 26, el político estará celebrando uno de los días más felices de su vida, tras contraer contraer matrimonio con su novia Anna Ruiz en La Rioja.
A la boda, un enlace civil que se ha celebrado a las 12 en Bodegas Riojanas, en la localidad de Ceninero y que ha oficiado Ignacio Espinosa, tío de Alberto Garzón y expresidente del Tribunal Superior de La Rioja, estaban invitadas unas 200 personas, pero la coincidencia con la manifestación ha hecho peligrar algunas presencias ilustres. Como la de los diputados comunistas de Podemos Pablo Iglesias e Irene Montero, que han tenido que hacer verderas piruetas para poder sasistir a ambos actos. Entre los invitados se encontraban también conocidos miembros de IU, como el exdirigente Julio Anguita.
Sandalias rojas
El novio vestía un elegante traje tipo chaqué corto, con chaqueta azul oscuro a juego con la corbata y pantalón gris como el chaleco. La novia lucía un vestido blanco con bordados que en la espalda se hacían transparentes y un tocado de florecitas en el pelo de las que pendía un largo velo. Como contrapunto a ese ‘look’ tan romántico, unas sandalias rojas que demostraban que bajo el vestido había una mujer que de cursi nada de nada.
El comunista Alberto Garzón ha esperado a la novia a la puerta del edificio, y cuando ella ha llegado, se han fundido en varios tiernos besos. Tras la ceremonia, a las 14.00 horas, se ha celebrado el banquete nupcial en el restaurante La Huerta vieja de Laguardia, una población que está solo unos kilómetros de Cenicero, aunque ya pertenece a la provincia vasca de Álava.
Barcelona en el corazón
La ilusión de los preparativos de la boda no le ha hecho olvidar a Alberto Garzón que hoy tenía una importante cita en Barcelona, y un par de horas antes del enlace el político ha querido tener un recuerdo especial hacia la ciudad, para dar su apoyo y mostrar que de algún modo estaría presente. Así daba a entender en su cuenta de la red social Twitter que tenía ‘el corazón partío’:
Tras el enlace, el político ha sido ‘trending topic’ en la red social Twitter, pero no por esa razón, sino por el hecho de haberse gastado 300 euros por cubierto en una ceremonia con 200 invitados.
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