Blanca Suárez es, quizás, la actriz más de moda que tengamos en el panorama nacional. Sus apariciones en las redes sociales, estilismos y cambios de novios ayudan a completar la popularidad de esta actriz que está siempre en el candelero. Con la segunda temporada de las Chicas del Cable en el cartel de Netflix y cuando se le acaba de pillar besando a Mario Casas, ha llegado el momento de saber cuáles son los secretos de esta mujer de 28 años que no para de ser admirada allá por donde va.
Sé una diva
Las divas nacen, no se hacen. Para serlo tu carácter tiene que tener unas cualidades que no están al alcance de todos. Una diva es esa persona que entra en silencio en un restaurante y todos se giran a observarla; es una persona profesional que cuando está en el trabajo no se queja, sino que realiza sus tareas a la perfección y escucha a los demás; es esa persona cuya calma, quizá por timidez, se convierte en su carta de presentación. Todo esto es lo que dicen de ella quienes han trabajado con Blanca. Alex de la Iglesia, que la dirigió en Mi gran noche y en El bar, dijo de la actriz que es una estrella porque «…es una de esas personas que está a disposición absoluta, que no exige nada porque lo tiene todo, que siempre está por encima de los problemas». Se acabaron las divas de antaño con manías extravagantes como llamar para que se les cambie el colchón de la habitación del hotel o llenar la bañera de agua mineral. Las divas, divas, no necesitan nada de esto porque, como Blanca, tienen claro que ellas ya tienen todo eso y más.
Sé de tu tiempo
Si vives en el siglo XXI y lo que está de moda es utilizar las redes sociales, que los paparazzi te persigan y escribir en un blog, entonces haz como Blanca: tenlo todo. La actriz no tiene la mínima intención de huir de ser una millennial y, visto los resultados que le ha dado, ni falta que le hace. Por eso, Blanca se siente como pez en el agua en Instagram, mostrando su día a día o sorprendiendo a sus seguidores con fotos que rompen moldes.
Además, a pesar de ser una de las actrices más perseguidas por la prensa del corazón, Blanca ya está por encima del bien y del mal y ha dejado de intentar esconderse de sus perseguidores. Sabe que haga lo que haga siempre será el foco de atención, así que ha tomado la actitud inteligente de si no puedes con el enemigo, únete a él.
Y, por supuesto, si estamos en la época de las It girl y en internet están triunfando algunas influencers que no tienen ni la mitad del glamour de Blanca, ¿cómo iba a dejar la actriz pasar la oportunidad de tener un blog? Eso sí, tienes que ser lo suficientemente inteligente como para entender que esto de ser influencer es una burbuja y que una retirada a tiempo es lo mejor que puedes hacer. Blanca se dio cuenta el año pasado y, tras 3 años y medio de vida del blog, decidió despedirse de sus seguidores con una elegante carta de esas que dejan huella.
Sé libre
Si tienes a los fotógrafos persiguiéndote, a la industria del cine analizándote y a los compañeros de profesión juzgando cuáles son los trabajos que no deberías realizar, es bastante probable que te sientas coaccionado a la hora de tomar una decisión. Este no es el caso de Blanca. Ella hace lo que le apetece cuándo le apetece y sin importarle el qué dirán y, por lo visto, no le ha ido nada mal. A pesar de ser una de las actrices más cotizadas del panorama nacional, ella está encantada con su serie en Netflix o haciendo de Isabel de Portugal en la serie Carlos, Rey Emperador, cuando el medio televisivo es el peor considerado entre los actores.
A Blanca nunca le ha importado dejarse ver en los diferentes medios ni realizar todo tipo de papeles: desde la chica de la película a mi Gran Noche, donde demostró que también estaba hecha para la comedia; paseando con su bici en un papel secundario de Los amantes pasajeros de Almodóvar; interpretando a Verónica en el thriller Carne de Neón, donde demostró que también le gusta el peligro o haciendo de Ingrid en Los Pelayos, película sobre una familia que desplumó a un casino y donde comprobamos que jugar a la ruleta en vivo y en directo es diferente y emocionante, y más si la crupier es Blanca Suárez.
A Blanca no se le caen los anillos por hacer cualquier tipo de papel por pequeño que sea, del mismo modo que hace oídos sordos cuando oye las críticas por haber decidido ser la imagen publicitaria de una marca de lencería, ya que algunas voces consideran que no aporta nada a su profesión. Pero a ella le gusta la moda y quiere ser libre para elegir lo que quiera hacer con su carrera. Y, por el momento, parece que va por el buen camino.
Sé tu mismo
Hay muchos famosos que alcanzan el éxito, pero solo unos pocos permanecen en él durante toda su carrera. ¿Qué diferencia hay entre Sofía Loren o cualquiera de sus coetáneas? Sin lugar a dudas su personalidad. A Blanca no le importa ser criticada por sus estilismos porque ella, simplemente, se pone lo que le da la gana.
Tampoco tiene pudor para mostrar cuándo y de quién está enamorada, así que siempre hemos podido seguir su vida sentimental al dedillo: desde Miguel Ángel Silvestre al que parece que se ha convertido en su nueva pareja Mario Casas, sin olvidar el corto romance que vivió con el cantante Dani Martín cuando fue la protagonista de su videoclip.
Pero sobre todo, si algo diferencia a esta celebrity de muchas otras del panorama actual, es su falta de tapujos para reconocer sus debilidades y mostrar su fidelidad y agradecimiento a todos los que la quieren y la acompañan en su viaje por la fama, tal y como pudimos ver cuando se le saltaron las lágrimas en los últimos Premios Ondas al hablar de su familia.