Por Erik Encinas Ortega para elmunicipio.es
Ada Colau, la candidata de Barcelona en Comú que ganó las elecciones municipales del pasado domingo, se ha comprometido con todo su empeño a cambiar el actual modelo de ciudad hacia uno más social e igualitario.
Colau pretende conseguir su objetivo mediante un acuerdo con las CUP, PSC y ERC, dejando de lado a CIU y PP. Esto evidenciaría que los cambios en Barcelona vendrán solo de la mano de la izquierda, y no precisamente de la moderada. Por lo tanto, una gran parte de los barceloneses sentirán que lo que han votado da exactamente igual, ya que la derecha convergente y la del Partido Popular tendrían únicamente una función de oposición, pero no de gobernabilidad.
Por lo tanto, los tiempos de Trias se han terminado en Barcelona, porque ahora el colauismo ha llegado para implantarse como una gran fuerza frente a la austeridad y los recortes que se han producido en la ciudad. Pero ¿es Colau la mejor opción para Barcelona?
Pues verán, desde que alternativas políticas como la de Ada Colau están cerca del poder, en este caso de la alcaldía de Barcelona, lo que se ha conseguido es lo siguiente: la bolsa cayendo, la prima de riesgo se disparó un 17% en tres días y dos grandes evento que dan ingresos a la ciudad, el Mobile World Congress y la Fórmula 1 están siendo muy perjudicados. Y como si fuera poco las leyes le dan lo mismo para conseguir sus fines, porque asegura que desobedecerá las leyes que le parezcan injustas. Además se ha declarado oficialmente a favor del proceso soberanista para ganarse el apoyo de Esquerra Republicana. Algo que no iba en su programa electoral.
En conclusión, la izquierda radical ha ganado en Barcelona, y ahora se está uniendo para gobernar, y eso lo debemos de reconocer todos, nos guste más o menos, ya que es esa la realidad. Y pienso firmemente que esto no ha hecho nada más que empezar.